■ Director del Colegio de Médicos señala que la diferencia está en la dosis, que puede aumentar
Jesús Fernández Candelas, director del Colegio de Médicos de Zacatecas, mencionó que el cambio de claves en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), sobre todo para pacientes con hipertensión y diabetes, no afectaría el tratamiento de los derechohabientes, pues la única diferencia se basa en las dosis, que pueden aumentar, y esta estrategia sería para optimizar el abastecimiento de medicamentos.
Descartó que el cambio de 30 claves de medicamentos dentro del IMSS, entre ellos la insulina glargina, pudiera afectar y producir daños a la salud de derechohabientes con diabetes, a quienes se administraría insulina de NPH.
Aclaró que la única diferencia que habrá entre estas insulinas, es que el paciente recibirá dos inyecciones diaria de insulina de NPH, pues ésta se debe aplicar cada 12 horas, mientras que la insulina glargina se aplica solamente una vez al día.
“Aquí en este tema lo único que se ve negativo es el aplicarse la insulina dos veces, pero no habría deterioro en la salud, ni en riñones, ni ojos, ni pie diabético, el problema sería aplicarse dos veces el piquete”, dijo el doctor.
Sin embargo, algo negativo es que se desaparecerán dos medicamentos del Seguro Social para pacientes con problemas de presión arterial, con los que se previenen ataques cardiacos, accidente cerebro vascular y angina de pecho. Los medicamentos que se sacarán del cuadro básico son Telmisartan y Niferidipino de 30 miligramos, por órdenes centrales, y solamente se dejó el Losartan.
“En ese tema de hipertensión, el instituto sí dejó el más chafa dentro del cuadro básico, cuando teníamos medicamentos como el Telmisartan. Mi inconformidad en eso se basa en que habiendo otros mejores de la misma familia, dejaron uno que tiene potencia baja y que se tiene que mezclar con otros medicamentos”, expuso Fernández.
Añadió que estas estrategias no son parte de un proyecto de privatización del instituto y del servicio de salud que se otorga, pues aunque se ha rumorado que se quiere privatizar el IMSS, esta estrategia se realiza por otra cuestión.
Lo que busca el instituto es que se optimicen los medicamentos y que la población cuente con abasto suficiente de insumos. “El paciente piensa que cuando se le cambia el medicamento por otro, se le da uno de baja calidad, cuando no es así. Este estereotipo permitirá generar el estándar del paciente viendo cómo responde a estos fármacos”, explicó el médico.
