Durante el transcurso del año, los registros de la Coordinación Estatal de Protección Civil indican que aproximadamente de 10 a 11 hectáreas del territorio zacatecano se han visto afectadas por incendios forestales. En la zona conurbada, destacan, se han atendido un total de 31 reportes de incendios en terrenos baldíos.
En una entrevista con el responsable de la Coordinación de Protección Civil, se informó que el inicio oficial de la temporada de incendios forestales fue el pasado 29 de enero.
En ese contexto, se llevó a cabo un evento organizado por la Coordinación Estatal de Protección Civil del Estado en colaboración con la Comisión Nacional Forestal (Conafor), en el cual, se presentó la brigada comunitaria encargada de participar en la lucha contra los incendios. Subrayando así la importancia de la cooperación entre instituciones y la sociedad para abordar esta problemática.
Destacando el panorama a lo largo del año, se registró el incendio más significativo en el municipio de Monte Escobedo, donde se estima que entre ocho y diez hectáreas fueron consumidas por el fuego.
Según se mencionó, la mayoría de los incendios forestales tienen origen humano, representando un 90 por ciento del total. Entre las causas más comunes se encuentran el descuido de fumadores que arrojan colillas de cigarrillos en áreas susceptibles a incendios, así como el uso irresponsable del fuego en actividades agrícolas o recreativas. Por lo cual se hace un llamado a la comunidad zacatecana a evitar tales actos.
Otro aspecto a considerar es el efecto lupa, que representa aproximadamente el 1 por ciento de los incendios forestales en el estado. Este fenómeno ocurre cuando la concentración de luz a través de un objeto como un cristal genera suficiente calor para iniciar un fuego en materiales inflamables cercanos.
De los 31 reportes de incendios en la zona conurbada, se ha identificado que las áreas afectadas han sido: el Cerro de Bufa, Cerro de la Villa, Las Antenas, Lomas Bizantinas, Alma Obrera y Guadalupe, entre otros. Estos incidentes, destaca, son una advertencia a la importancia de implementar estrategias de gestión del riesgo que aborden las necesidades específicas de cada área afectada.
Finalmente se dio a conocer que, para abordar esta problemática, se están llevando a cabo esfuerzos coordinados entre la Coordinación de Protección Civil, la Conafor, los gobiernos municipales y otras instituciones pertinentes.
Estos esfuerzos incluyen la capacitación y el fortalecimiento de las brigadas locales, así como la promoción de medidas preventivas y la sensibilización de la comunidad sobre la importancia de preservar nuestros recursos naturales y prevenir incendios forestales.
