En Zacatecas se debe conformar un frente sólido para abogar por un presupuesto de emergencia para 2024, sobre todo orientado a enfrentar los problemas de la falta de agua, las carreteras y la sequía que se vive en el campo estatal, consideraron, en conferencia de prensa, integrantes del Frente Popular de Lucha por Zacatecas (FPLZ) encabezados por el senador José Narro Céspedes, quien aseguró que esta semana será clave por la comparecencia del titular de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público en el senado y por reunión planteada al gobernador David Monreal Ávila.
El presupuesto para Zacatecas en 2024 asciende a 35 mil 414 millones de pesos, es decir 905 millones de pesos más que lo aprobado para 2023, no obstante, en términos reales por la inflación, dijo, el presupuesto es menor, sobre todo en los ramos 28 y 33, que se refieren a participaciones. Con esto, a decir de Narro Céspedes, Zacatecas ocuparía la penúltima posición en el país en cuanto a la distribución de participaciones federales.
Los únicos apoyos adicionales que recibirá el estado son por 60 millones de pesos para el tema de saneamiento del agua y estará a cargo de Conagua; y 50 millones de pesos para el gasto concurrente entre el gobierno estatal y la Sader. Pero de ahí en más, no se vislumbra una obra importante de infraestructura para Zacatecas, ni un programa trascendente para los zacatecanos.
En ese sentido, Narro Céspedes expuso que son necesarias obras estratégicas sobre todo en dos rubros fundamentales: el tema del agua, que es lo más importante para el corredor urbano de Zacatecas; y el tema de las carreteras, para darle viabilidad económica al estado; pero también mencionó que es importante el apoyo emergente para el campo, porque se percibe para el próximo año la sequía se agravará y será un “año de hambre”, pues más del 70 por ciento del territorio estatal se encuentra ya en esta condición.
Por ello, consideró necesario también que el gobierno estatal diseñe una estrategia para impulsar el empleo y el desarrollo de las zonas rurales en todo el estado, además de la importancia que tendría la declaratoria de emergencia. También, dijo, a Zacatecas le hace fortalecer su capacidad de gestión para infraestructura y una mejor atracción de inversión privada para lograr un mejor desarrollo.
Por su parte, Javier Enríquez consideró que, independientemente de las relaciones buenas o malas que haya con el gobierno del estado actual, se está buscando y planteando para Zacatecas un mejor presupuesto y orientado, sobre todo, al campo, pues se avecina un año muy crítico y es necesario un presupuesto de emergencia que dé una salida a los campesinos zacatecanos.
“Creo que más allá de pensar en un segundo piso, en una feria nueva, que van a pavimentar 3 o 4 kilómetros, creo que hay que estar pensando que viene un año muy crítico para Zacatecas, pues hay zonas históricamente muy productivas como Calera, Morelos, donde no se sembró nada, ni iniciaron cultivos siquiera. Viene un año muy malo para Zacatecas”, advirtió.
