Las y los jóvenes en México constituyen el 24.6% de la población total con 30.7 millones; el 50.8% son hombres (15.6 millones) y 49.2% mujeres (15.1 millones). Representan nuestro presente, pero también sus problemas y desafíos son determinantes para la dirección futura del país.
El llamado bono demográfico de nuestro país, es decir la población menor de 30 años, hoy demanda soluciones urgentes a los problemas que enfrenta, mismos que con la pandemia de la COVID-19 se han ampliado y profundizado.
La vida de las niñas, niños y adolescentes (NNA) se ha visto perjudicada de manera negativa en prácticamente todos sus ámbitos, pues sus posibilidades de educación, el acceso a los servicios de salud y una vivienda digna, además de la imposibilidad de tener un empleo y las restricciones de convivencia con sus amigos se han visto disminuidas o perturbadas.
De acuerdo con los NNA, el 52% considera que se incrementó la violencia de género con la pandemia; 64% reconoce que la situación financiera familiar es una gran preocupación; al 51% de ellos les preocupa perder a sus familiares y amigos y el 52% señala que le hubiera gustado tener acceso a tratamientos o apoyo psicológico que le permitiera lidiar con el estrés derivado de la situación sanitaria actual.
Los Resultados para México de la Encuesta de las Naciones Unidas sobre Juventudes de América Latina y el Caribe dentro del contexto de la pandemia de la COVID-19 también revelan que las personas jóvenes son el grupo con menor protección a la salud y seguridad social, y ante la crisis sanitaria el acceso a tratamientos de salud mental son mas que necesarios, son urgentes.
Las y los jóvenes mexicanos consideran igualmente urgente atender la violencia feminicida que se ha incrementado durante la pandemia como los estereotipos en los medios de comunicación que fomentan la desigualdad y la violencia contra las mujeres
Las consecuencias de la Covid-19 en lo que respecta a educación, de acuerdo con INEGI, revelan que 33.6 millones de personas entre los 3 y 29 años estaban inscritas en el ciclo escolar 2019-2020. Por sexo, la población de hombres inscrita fue de 62.3% y de mujeres, de 61.7%. De este grupo, 740 mil (equivalente al 2.2%) no concluyeron el ciclo escolar por motivos asociados a la COVID-19 y 8.9% por falta de recursos financieros. El 1.9% de las mujeres inscritas en escuelas públicas no concluyó el ciclo escolar frente al 2.1% de los hombres.
Para el actual curso escolar 2020-2021 se inscribieron 32.9 millones de personas jóvenes, lo que equivale al 60.6% de la población de 3 años de edad a 29 años. Derivado de la COVID-19 o falta de recursos, no se inscribieron 5.2 millones de personas, equivalente al 9.6% del total de población en ese rango de edad.
Entre los motivos asociados a la COVID-19 para no inscribirse en el actual ciclo escolar encontramos que el 26.6% considera poco funcionales las clases a distancia; 25.3% señala que alguno de sus padres o tutores se quedaron sin trabajo, 21.9% carece de computadora u otro dispositivo o conexión de internet y más de la mitad de la población de 3 a 29 años tiene mucha disponibilidad para asistir a clases presenciales.
En materia de emprendimiento los jóvenes demandan más políticas públicas que fomenten y apoyen la innovación y en el caso de las mujeres e indígenas o con alguna discapacidad existe la percepción que los recursos y la capacitación son insuficientes sin dejar de mencionar que la estigmatización y las desigualdades que enfrentan limitan aún más las posibilidades de ser independientes e iniciar sus propios negocios.
Los NNA mexicanos tienen muy bien identificados los principales problemas que les impiden el acceso a la justicia, concretar sus proyectos de vida tanto a nivel personal como profesional, además de contar con un trabajo con ingresos suficientes que les permita alcanzar su independencia económica.
La atención de las necesidades de las personas jóvenes debe ser una prioridad para todas las candidatas y los candidatos en sus plataformas políticas de cara a las próximas elecciones en la que serán votados por más de 26 millones de mujeres y hombres jóvenes. ■
