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jueves, 25 abril, 2024
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Marchan miles para recordar la masacre del 2 de octubre de 1968

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Por: MARTÍN CATALÁN LERMA •

Convocan a organizarse contra la violencia de Estado y defender la educación pública

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Los días 11 y 12 de octubre visitarán Zacatecas algunos de los integrantes del Consejo Nacional de Huelga

 

Miles de estudiantes e integrantes de organizaciones sociales marcharon este martes para conmemorar el 50 aniversario de la masacre estudiantil del 2 de octubre de 1968 en Tlatelolco, en cuyo acto político exigieron justicia y se sancione los responsables no solamente de ese suceso, sino también de la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa.

La marcha comenzó en la explanada de la Unidad Académica de Ingeniería de la Universidad Autónoma de Zacatecas (UAZ), avanzó sobre el bulevar Adolfo López Mateos hasta ingresar al Centro Histórico por la avenida González Ortega e Hidalgo, hasta finalizar en Plaza de Armas.

Durante la marcha, integrantes del Frente de Estudiantes Zacatecanos Unidos (FEZU) acusaron al grupo denominado Fuerza Universitaria Autónoma (FUA) de parar labores en la Máxima Casa de Estudios de la entidad con el propósito de disolver la marcha y evitar más afluencia.

A en el mitin político, Alegría Torres, de la preparatoria 1 de la UAZ, manifestó que “es momento de levantar la cabeza por todos los movimientos estudiantiles, los sindicatos y las mujeres. Es momento de detener los feminicidios y la violencia. Es momento de vivir en unidad y en paz”.

Otra alumna de la preparatoria 2 expresó que “el 2 de octubre no se celebra la muerte, se conmemora la vida. A 50 años de la masacre, el 68 es una fecha histórica colectiva que hoy como ayer seguimos gritando y exigiendo justicia”

Dijo que urge una visión crítica contra el sistema “que nos sigue matando” y cuestionar la participación histórica delas mujeres en el devenir político, ya que estas han sido excluidas a lo largo del tiempo.

En Zacatecas, manifestó que ser mujer y estudiante es un riesgo para morir y terminar en un lote baldío, como fue el caso de Cynthia Nayeli el año pasado y cuya muerte ya ha quedado en el olvido.

Cuestionó que en la UAZ no se han activado protocolos para el cuidado de los estudiantes, lo que hace pensar que “el narcogobierno nos quiere muertos, el sistema nos quiere muertas”.

También intervino José Ángel Palacios, estudiante de la Unidad Académica de Medicina de la UAZ, quien expuso que antes del movimiento de 1968 hubo manifestaciones de médicos para exigir el pago de salario y aguinaldo, ante lo cual el gobierno respondió con represión y encarcelamiento. Así, miles de médicos fueron sustituidos por médicos militares y enfermeras fueron secuestradas y violadas.

Luego ocurrió el lamentable hecho que cobró la vida de centenares de jóvenes que solamente exigían mejores oportunidades, que cuestionaban el autoritarismo del gobierno, y que demandaban la liberación de los presos políticos.

“Un día como hoy, 2 de octubre pero de 1968, en la Plaza de las Tres Culturas de Tlatelolco, miles de personas fueron privadas de sus derechos fundamentales, entre ellos el derecho a la vida. A 50 años no solamente exigimos justicia a los responsables, también exigimos justicia para los 43 estudiantes desaparecidos”, dijo.

Palacios indicó que por desgracia no solamente son 43, sino que cada vez son más personas las que pierden la vida o las que desaparecen por la inseguridad que prevalece en todo el país.

En el mitin participó también Pedro Martínez Arteaga, secretario general del Sindicato de Personal Académico de la Universidad Autónoma de Zacatecas (Spauaz), quien expuso que lo ocurrido hace 50 años marcó un rumbo más democrático en el país, pero la descomposición social ha resurgido en todo el país.

Con la alternancia en el poder, manifestó la posibilidad de que mejoren las condiciones, pero “no bajaremos la guardia para exigir la gratuidad de la educación superior y de la educación toda como derecho humano”.

Anunció que el próximo 11 y 12 de octubre visitarán Zacatecas algunos de los integrantes del Consejo Nacional de Huelga, entre ellos Víctor Guerra, David Roura y otros sobrevivientes de la masacre,

Raúl Rivera Lara, participante en el movimiento estudiantil de 1968, recordó que años atrás hubo antecedentes en varios estados que permitieron a los estudiantes adquirir cierta experiencia.

“Tuve la oportunidad de ser representante sustituto del Consejo Nacional de Huelga, con la consigna de que si eran aprehendidos algunos compañeros, entre ellos Cabeza de Vaca, entraríamos nosotros, Por desgracia, un día después de que fuimos nombrados, fuimos aprehendidos y llevados a los sótanos de la Procuraduría General de la República. Ahí vimos la manera en que trabajan: primero intimidarte hasta hacerte correr, luego golpearte hasta hacerte renunciar, y si no entiendes, ir por tu vida.”.

Paralelamente, más de 500 estudiantes de la Normal Rural de San Marcos “General Matías Ramos Santos” realizaron otra marcha para conmemorar la masacre estudiantil de 1968, aunque esta tuvo otro recorrido.

A diferencia de la marcha que fue organizada por estudiantes universitarios, los normalistas iniciaron frente a las instalaciones de la Secretaría de Educación de Zacatecas (Seduzac) y avanzó sobre el bulevar Adolfo López Mateos, hasta llegar a la Plaza Bicentenario. Ahí realizaron un mitin político y actividades culturales.

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