■ Instauran políticas ambientales en la UAZ, como los espacios libres de humo de tabaco, informa
La contaminación que es producto de la actividad minera en el estado es un problema que sólo se podría atender si el gobierno asume una postura firme contra esas empresas y una convicción sólida de favorecer a la sociedad que representa, señaló Alejandra Moreno García, subcoordinadora de Cultura Ambiental y Desarrollo Sustentable de la Universidad Autónoma de Zacatecas (UAZ).
“Todos tenemos que tomar acciones, pero se necesita una decisión firme de los gobiernos para trabajar por la sociedad, porque los miles de documentos que surgen para hacer frente al cambio climático nunca se van a reflejar en el bienestar de la sociedad y vamos a seguir el número de gente con problemas de salud”, indicó.
Aunado a ello, recordó que la actividad minera en el estado no ha impactado en la economía zacatecana y las condiciones son muy precarias, generando entonces la imposibilidad para transitar hacia un desarrollo sostenible.
Por el contrario, la tendencia que se observa es que las acciones de Gobierno federal y estatal son beneficiar únicamente a las grandes empresas, provocando con ello el desarrollo no de la sociedad, sino solamente “de unos cuantos”.
Por otra parte, Moreno García informó que la Universidad está aplicando diversos programas para impulsar un desarrollo sostenible al interior de la Máxima Casa de Estudios, en cada uno de sus espacios académicos.
Entre los compromisos de la UAZ, dijo, está la ambientalización de la currícula, mediante la cual se pretende que en el transcurso del campo disciplinar de los estudiantes, ellos tengan una visión sobre el impacto de su futura profesión en el medio ambiente. Es decir, “se pretende que haya acciones de retroalimentación para cuando sean profesionales, estén trabajando a favor del ambiente”.
Otra política que se plantea instaurar en la institución es el tema de la gestión ambiental, que se refiere a las actividades que de forma rutinaria realizan los universitarios todos los días, tales como el uso del agua y de la energía eléctrica, separación de recursos orgánicos e inorgánicos, desarrollo de áreas verdes, uso de residuos peligrosos ya sea infectocontagiosos o pilas.
Para complementar el proyecto, se fomentan los espacios 100 por ciento libres de humo de tabaco y dietas sanas, con lo cual se espera que haya un impacto real en los estudiantes de una manera integral, según explicó Moreno García.
