La inteligencia artificial es uno de los conceptos de moda en el sector tecnológico. Está en boca de todos, y su implementación está siendo progresiva y a marcha de crucero. Nadie quiere quedarse al margen de esta nueva revolución técnica, que permite simplificar procesos, mejorar los márgenes de tiempo en la producción y personalizar la experiencia de usuario. Uno de los sectores que más está empujando por la aplicación de la IA en sus dinámicas es el iGaming. Todas aquellas empresas vinculadas a los juegos de casino y las apuestas en general. En este artículo, vamos a detallar para qué se utiliza en este campo concreto, tocando tres aspectos concretos: la personalización, la creación de nuevas propuestas y las mejoras en términos de seguridad.
Personalización de la experiencia de juego
Una de las misiones máximas cuando se crea un nuevo producto es que este se adapte a las necesidades concretas de cada uno de los usuarios. Cuantos más potenciales clientes se sientan interpelados, mayores serán los números. Las empresas asociadas al iGaming intentan que todo el mundo se sienta satisfecho con sus propuestas, intentando adaptar los juegos lo máximo posible. En este aspecto, la IA juega un papel clave, ya que identifica las preferencias individuales y las potencia al máximo nivel. No deja de ser una tecnología que aprende a tiempo real, optimizando todos los procesos.
Entre los elementos que la inteligencia artificial está adaptando poco a poco a las necesidades de cada jugador se encuentran los diferentes tipos de bonos. Por ejemplo, entre las promociones más populares entre los usuarios se encuentran los bonos sin depósito disponibles para casinos en línea en México, reseñados en el enlace anterior por el equipo editorial de Oddschecker.
Una experiencia más personalizada elimina aquellos aspectos que no llaman la atención del cliente, y potencia todos aquellos que sí lo hacen. Todo está más optimizado y es mucho más eficiente.
Creación de nuevos juegos
Como hemos comentado anteriormente, la inteligencia artificial sirve para optimizar y mejorar procesos. Pero también puede ser una herramienta útil en el momento de crear productos de cero. La IA puede aplicarse para crear nuevos juegos si se le aportan los datos suficientes para que tenga la máxima información posible. Si se administran los títulos más jugados, es posible definir un patrón que identifique qué está gustando más de un producto u otro. En ese sentido, se pueden obtener nuevas ideas, enfoques o propuestas que quizás no se habían planteado.
La inteligencia artificial sirve como un brainstorming masivo y prácticamente infinito que ayuda a definir dinámicas de la industria. Y la cosa irá a más.
Mejora de la seguridad del usuario
Otra de las misiones máximas del sector del iGaming es demostrar que sus portales web son seguros. Que lo sean, y también comunicarlo de manera eficiente. Del mismo modo que las tecnologías van evolucionando paso a paso, también lo hacen las potenciales amenazas. Es por ello que hay que estar permanentemente actualizado, y aquí es donde entra la Inteligencia Artificial. El análisis de la información permite estar al día en términos de seguridad, identificar agujeros y ver patrones.
Otro de los aspectos relevantes es la certificación del juego limpio. La mayoría de las empresas del sector utilizan algoritmos que eliminan funciones predeterminadas. Se pretende que así, del mismo modo que sucede en el juego presencial, sea únicamente el azar el que determine el éxito o el fracaso de una determinada jugada. La inteligencia artificial perfecciona, moldea e implementa correctamente este tipo de algoritmos, dando fe de que todo funciona como debe funcionar: correctamente y sin amenazas ni riesgos de seguridad en el intercambio de información y en la dinámica de juego en sí.