14.2 C
Zacatecas
viernes, 26 abril, 2024
spot_img

Carrosse d’or en Cannes para John Carpenter, maestro del horror

Más Leídas

- Publicidad -

Por: SERGI RAMOS •

■ Se trata de valorar la carrera de un director férreamente anclada en el cine de terror y ciencia-ficción

- Publicidad -

■ La carrera del estadounidense ha corrido paralelamente a la de la industria cinematográfica del género

 

El Festival de Cannes otorgó el premio La Carrosse d’or a John Carpenter, tras llevárselo el curso pasado Martin Scorsese. Para el festival se trata de valorar la carrera de un director férreamente anclada en el cine de terror y ciencia-ficción, pero marcada por un indiscutible sello de autor, que tuvo una notable influencia en el cine de los años 80 y en toda una generación de espectadores y amantes del género. Este reconocimiento compensa el ostracismo que ha sufrido Carpenter desde hace ya demasiados años, sin encontrar apoyo ni de productoras ni de una parte de la crítica para poder proseguir su trabajo como cineasta.

Hitos desde el cine independiente
La carrera del director estadounidense ha corrido paralelamente a la de la industria cinematográfica del género, así como a sus avances técnicos. En su primera película como profesional, Carpenter imprime ya en 1976 su personalidad dirigiendo, produciendo y escribiendo el guion y la música de Masacre en la crujía 13. La película narra la historia de un grupo de personajes encerrados en una comisaría de policía, que son víctimas del asalto nocturno de una banda que ha decidido liberar a su cabecilla. Rodado en huis clos, como un Álamo moderno, esta producción independiente de bajo coste magnifica el suspense producido por un enemigo invisible que acecha sin tregua a los que se refugian dentro, esperando la llegada del día. Este dispositivo narrativo del encierro se convertirá en una de las constantes de su cine.

Inmediatamente después, Carpenter consigue realizar, otra vez con música y guion propios, una de las obras más importantes del final de los 70 y principios de los 80. Se trata de Halloween, que abre las puertas a un nuevo género, el slasher, asesino en serie imbuido de un aura sobrenatural que le otorga invulnerabilidad y ubicuidad, y que tendrá una descendencia notable hasta hoy. Señas de identidad: máscara, cuchillo, cámara subjetiva y mucha sangre en primer plano.

Creando escuela en los 80
El éxito de la película le abre las puertas de los grandes estudios, con películas desiguales, como la excelente y divertida visión de un futuro distópico en 1997: Escape de Nueva York (New York 1997), junto con su actor fetiche, Kurt Russell; o la decepcionante adaptación de Stephen King sobre un coche asesino, Christine. Pero quizás su obra más importante, que encarna a la perfección los parámetros del género fantástico y de terror de los 80, sea La cosa del otro mundo (The thing), remake de una película de Howard Hawks. En ella, Carpenter explotará al máximo todos los recursos permitidos por el perfeccionamiento de los efectos especiales en los 80, para mostrarle al espectador lo que anteriormente se había mantenido oculto en el fuera de campo: monstruos tentaculares, estallidos corporales, transformaciones orgánicas. Una nueva poética del cuerpo fantástico que marcará el futuro del género.

Fin de trayecto
Tras realizar la que probablemente sea su última gran película en 1994, En la boca del terror (In the mouth of madness), vertiginoso viaje al mundo de la locura y de la creación, John Carpenter encontrará cada vez más dificultades para sacar adelante sus proyectos. Tras dirigir algunos largometrajes (el último en 2010) y series para la televisión, el director parece haber encontrado refugio componiendo y tocando música, retomando una pasión que sobresale en su cinematografía, con temas de estructura sencilla y repetitiva, pero que siguen resonando hoy en las mentes de cualquier espectador de sus películas.

- Publicidad -

Noticias Recomendadas

Últimas Noticias

- Publicidad -
- Publicidad -