En el documento que, a manera de informe, desarrolló la Secretaría Ejecutiva del Instituto Nacional Electoral, y que hemos venido citando de forma continua en este espacio, entre los muchos riesgos que se pueden encontrar, no solo los hay en el ámbito federal, también se pueden apreciar los respectivos a lo local. Para muestra, cabe el ejemplo de los últimos renglones del propio Informe, que culmina: “En particular, resulta incompatible la organización de los procesos electorales de Coahuila y el Estado de México, bajo las reglas de la actual legislación, a la par de una reestructuración orgánica y normativa del Instituto, que según los artículos transitorios debe llevarse a cabo entre enero y agosto” (1).
Pero no solo se trata de las elecciones de carácter local a desarrollarse este año, también se puede conocer de diversos riesgos que implica el multicitado “Plan B”, para los OPLES u Organismos Públicos Locales Electorales, entre ellos los relacionados con las siguientes acciones: coordinación entre el INE y los OPLES; el ejercicio de la facultad de asunción, que no es sino la tarea de asumir la organización de los procesos electorales locales; los sistemas de información para la coordinación INE-OPLES y su gestión; la notificación, seguimiento y demás procedimientos relativos a los acuerdos y resoluciones del INE que estén relacionadas con los OPLES; el proceso de designación de las consejerías de los OPLES, incluida la presidencia de los mismos; todo esto relacionado con las funciones de la Unidad Técnica de Vinculación con los Organismos Públicos Locales (el desarrollo de tal análisis se pude encontrar en las páginas 48 a la 53 del citado documento).
Mención aparte merece lo relacionado con el cambio de calendarios electorales en lo local, particularmente en lo que se refiere al límite para adecuarlos, que fenece, según el proyecto y el documento emitido por el INE, el próximo agosto, cuando en varias entidades el proceso inicia en septiembre, caso en el que también se encuentra Zacatecas, salvo por una iniciativa presentada en la sesión del día 12 de diciembre del 2022 en la Legislatura del Estado, aún no aprobada y turnada a la Comisión de Asuntos Electorales, que tiene por objeto modificar el calendario local en materia electoral para que el proceso arranque el día 7 de enero del año en que se realice la elección (2).
Modificar la estructura vigente de los OPLES, que es también una propuesta que contiene el paquete de iniciativas, cuyo proceso legislativo continúa, también implica riesgos para estas instituciones de carácter local, sin embargo, este aspecto lo abordaremos en la próxima entrega.
Por lo pronto, la buena noticia es que el Senado de la República ha dado muestras de responsabilidad y apertura, al despresurizar la aprobación de dicho Plan B y ha recibido a personal del INE, encabezados por su Consejero Presidente y demás actores institucionales, para allegarse del contexto necesario para la discusión.
Notas:
1. Disponible en: https://repositoriodocumental.ine.mx/xmlui/handle/123456789/147695
2. Disponible en: https://www.congresozac.gob.mx/coz/images/uploads/20221212141354.pdf
@CarlosETorres_
