El PRI perdió en la capital del estado y de forma sorpresiva, los magistrados que defienden nuestro voto, lo echaron al bote de la basura, ahora tendremos que gastar otros 17 millones para volver a elegir autoridades, pero no todos acudirán a la elección, Morena y miles de ciudadanos hemos decidido que no vamos a participar y la semana pasada se desató la polémica por un espectacular en pleno boulevard metropolitano donde puede leerse: “votar te convierte en cómplice del robo, anulemos a los corruptos”, parece un berrinche pero en realidad es una estrategia política y social, por eso les comparto 3 razones para que ustedes tampoco participen.
1.- Para mí es una elección armada, el PRI tiene todo bajo control, pase lo que pase ellos decidirán quién gana la elección, ya nos quedó claro que con el control del Gobierno del Estado y con el control de la Presidencia de la República, tienen también el control y la obediencia de los magistrados locales y nacionales, el PRI volverá a anular la elección y se repetirá las veces que sea necesario hasta que les guste el resultado, ya demostraron que no le tienen respeto a las instituciones, ni a los ciudadanos, ni a las leyes, ni a nadie, cuando no ganan, arrebatan. ¿Entonces para que participar? ¿Para que la vuelvan a repetir las elecciones en caso de que los resultados no les gusten? ¿Para que gasten más dinero en más elecciones extraordinarias? Es mejor esperar 18 meses para las elecciones del 2018, asegurarnos de volver a ganar ampliamente y con la fuerza de una elección presidencial, asegurar la imparcialidad de las autoridades electorales.
2.- En ocasiones, no hacer también es hacer. Casi todas las revoluciones han triunfado con las armas, pero hace algunos años existió un hombre que derrotó al imperio más poderoso de su época sin disparar una sola bala. Le llamaban Gandhi, era hindú y pudo liberar a su pueblo del dominio inglés sin una sola bala, él usaba una cosa llamada “resistencia civil pacífica”.
En el caso de Zacatecas, al no votar, cada ciudadano le demostrará a los magistrados y a los que corrompieron a esos magistrados, que tienen la autoridad para anular elecciones, pero no tienen autoridad moral para decirnos qué hacer, cada voto nulo o cada voto que no vaya a las urnas, será una un reclamo de un ciudadano harto de que las leyes se tuerzan a conveniencia del poderoso.
3.- Los círculos viciosos se hicieron para romperse, en México estamos acostumbrados a que las autoridades cometen todo tipo de atropello y aparentemente no pasa nada, pero en realidad somos un país sin Estado de Derecho y eso limita nuestro crecimiento, les daré un ejemplo, acaban de pasar las elecciones en Estados Unidos y todavía no terminaban de contarse los votos cuando Hillary llamó a Trump para felicitarlo por su triunfo, Hillary pudo impugnar como lo hizo Judit, pudo desconocer los resultados e incluso pudo alegar que los ciudadanos que votaron por Trump carecen de algunos tornillos, pero Hillary se comió su orgullo, aceptó los resultados y le demostró al mundo que en Estados Unidos siempre se respetan las reglas, eso manda un mensaje muy poderoso, porque los empresarios que quieren invertir su dinero en Estados Unidos, saben que su inversión está segura, porque en aquel país todo mundo respeta las reglas, aquí no, aquí el PRI puede usar todas las trampas habidas y por haber sin consecuencias, pero si Morena hace una conferencia de prensa, entonces le anulan la elección ¿vamos a dejar que esto siga pasando eternamente sin protestar y sin evidenciarlo? ¿Vamos muy felices a la elección y nos olvidamos de todo? Yo digo que no, es hora de romper este círculo vicioso, es hora de hacer algo para que los que mandan, entiendan que estamos hartos de que las leyes se usen para proteger los intereses de unos cuantos.
No tiene caso participar en una elección que tiene como origen el robo descarado, el tráfico de influencias y la corrupción, que nadie nos diga que perdemos una gran oportunidad para derrotar al PRI, ya lo derrotamos pero no fue suficiente, parece que tendremos que esperar al 2018 para derrotar de un solo golpe al PRI, al sistema y al modelo de corrupción que se burla de los ciudadanos sin ningún pudor.
Judit será alcaldesa porque la corrupción así lo quiso, de lo contrario volverán a anular la elección y la repetirán hasta que ella gane, pero será una alcaldesa espuria, incapaz de reconocer su derrota y por lo tanto, incapaz de asumir sus victorias con honor, que la historia se lo cobre. ■
