SNTE-CNTE
El pasado 7 de marzo los trabajadores de la educación pertenecientes a la sección 34 del SNTE en el estado de Zacatecas, se unieron a un paro de labores de 24 horas convocado a nivel nacional por la CNTE (Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación), como parte de las jornadas de lucha en contra de la iniciativa de reforma a la ley del ISSSTE presentada por la presidenta Claudia Sheinbaum, pero sobre todo, por la abrogación total de la reforma hecha a éste instituto en el 2007 por el tristemente célebre Felipe Calderón. Dicha reforma, en términos reales, despoja a las nuevas generaciones del derecho a una pensión, les niega los servicios de salud gratuitos durante la vejez, además de que aumenta de manera exponencial la edad mínima para poderse jubilar, en sí, estamos hablando de un acto que solo pudo haber sido concebido y diseñado en una mente retorcida e inhumana, (como la de Felipe Calderón) ya que condena a los trabajadores en retiro a vivir en la precariedad y la incertidumbre, abandonados a su suerte.
Ante éste panorama tan desolador para todos los cotizantes al ISSSTE (no únicamente los trabajadores de la educación), es preciso preguntar, ¿si hay alguien que considere ilegitima y egoísta la lucha de los maestros por tener una vejez digna?, ¿hay acaso quien se atreva a juzgar de mezquindad el acto de valor y rebeldía de los trabajadores de la educación que han decidido que como cualquier mexicano, ellos también tienen derecho y sueñan con poderse retirar a una edad en la que todavía puedan disfrutar a su familia a cabalidad?, ¿o debemos normalizar que el estado exprima la vida de los maestros hasta su último aliento y los condene a pasar directamente “del salón al panteón”?. Las aspiraciones de los trabajadores de la educación son completamente legítimas y razonables, nadie podrá reprocharles que aspiren a la felicidad y a la estabilidad económica, laboral y de salud durante la vejez.
Para el próximo 19, 20 y 21 de marzo, los docentes en Zacatecas han anunciado que se suman al paro de 72 horas suscribiendo la misma exigencia. Esta reivindicación se volvió a poner en el centro del debate debido a que, desde el sexenio pasado había quedado la promesa del presidente López Obrador de enmendar las atrocidades cometidas a la ley del ISSSTE por el usurpador Calderón; y se entendía que solo era cuestión de afinar detalles y números para que la presidenta cumpliera con esa promesa que había hecho suya durante la campaña electoral del 2024. Pero no fue así, la propuesta de reforma presentada por el ejecutivo federal contempla muchas cosas, menos las que verdaderamente le duelen a los trabajadores cotizantes, y es en este escenario, que la CNTE, retoma con fuerza la demanda original que siempre ha estado presente en sus luchas y consignas “abrogación total de la ley del ISSSTE del 2007”.
En su largo bregar en contra de los atropellos orquestados de manera sistemática desde el poder, los trabajadores de la educación siempre han desobedecido las “ordenes” de los líderes nacionales del SNTE, que han hecho hasta lo imposible por convencer a sus huestes de que las reformas solo traen bienestar, felicidad y prosperidad. En la actual coyuntura la situación no es diferente, el autoproclamado líder nacional del SNTE Alfonso Cepeda Salas, quien además es senador por MORENA ha comprometido la sumisión del magisterio ante la nueva reforma. El SNTE siempre se ha caracterizado por su extraordinaria habilidad camaleónica, es decir, cambia de color según los intereses de los líderes en turno. En 2007, pusieron al servicio del panismo y la ultraderecha toda su estructura para ir a cada centro de trabajo a “domesticar” a los agremiados para que aceptaran con júbilo la ley del ISSSTE. En 2013, nuevamente el sindicato cambió de piel y se puso el traje tricolor, volviéndose el principal aliado del gobierno al avalar y promover la mal llamada reforma educativa, que entre otras cosas, despojaba a los maestros del derecho al trabajo. Ese mismo SNTE, en 2018 ondeaba las banderas promoviendo el voto por el candidato priista Jose Antonio Meade pero al conocer la avasalladora victoria del entonces candidato morenista López obrador, en menos de 3 días se autoproclamaron “soldados de la cuarta transformación”. Esa destacada habilidad de las cúpulas del SNTE, les ha dejado buenos dividendos, como es el caso del ahora senador morenista y líder del SNTE, a quien le han sabido premiar por mantener “a raya” a sus agremiados, por eso, prefiere permanecer calladito, pues bien sabe que así, se ve más bonito. Como dirían en mi pueblo, “cuando el perro tiene un hueso en el hocico, no puede ladrar”.
Los únicos que han dado la cara y puesto el pecho a las balas son los integrantes y dirigentes de la CNTE, quienes en todo momento han emprendido la lucha contra los proyectos y reformas neoliberales que trastocan sus derechos y su fuente de trabajo que es la educación pública y gratuita. ¡Se tenía que decir y se dijo!
No es justo cuando maestras y maestros como en mi caso, que por haber entrado al sistema joven, la tablita me obliga a trabajar 12 años más, cuando ya debería estar jubilada. No es el desgaste físico el que me aqueja, pero sí el desgaste emocional. Por algo anteriormente, se dijo, 28 años las mujeres y 30 los hombres, porque era lo ideal para la salud mental del docente. De manera, que termináramos en óptimas condiciones para vivir nuestra siguiente etapa con dignidad.