El pueblo Tolteca es tan sabio
que bien podría dialogar hasta
con su propio corazón.
Nezahualcóyotl (1402-1472),
Monarca Tlatoani de Texcoco
Acerca de la guía:
El Presidente de la República desde que tomo posesión como tal (diciembre de 2018), le ha apostado al proyecto que le denomina “de Nación” y que lo titula “La cuarta transformación”. Un tanto para justificar este proyecto, se pregona que la cuarta transformación es una realidad y que para fortalecerla es necesario construir, difundir y monitorear el documento denominado: Guía Ética para la transformación de México; en la elaboración de dicha guía, participaron un grupo de investigadores, peritos en la materia, estos argumentan, que en gran medida serviría de orientación para que se cumpla con los principios que se estipulan en el proyecto de nación. Por definición, la ética es una disciplina filosófica que estudia el bien y el mal, así como sus relaciones con el comportamiento del ser humano –moral-; sin darle una lectura completa a esta guía, me surgió una interrogante: ¿este documento será decreto o solo un exhorto?, misma que, aun leyéndola, seguiría con la misma duda; decreto o exhorto, ambos tienen su fundamento en un mandato, que para este caso en particular, es presidencial.
La Guía Ética para la Transformación de México, plantea veinte preceptos, mismos que no son otra cosa más que orden y mandato, todos estos hacen suponer que tienen prioridad unos de otros y, en consecuencia, se enlistan por orden de importancia –del respeto a la diferencia entre los seres humanos al respeto de los animales, las plantas y las cosas-. En un primer momento, la intención de esta guía es la de dar a conocer el por qué se hace necesario manifestar un comportamiento que se apegue a normas éticas para garantizar así, una vida en armonía con nuestra conciencia y para el bienestar y buen funcionamiento de toda una sociedad y, por supuesto, de las estructuras que la conforman. Se asevera además, que el abandono de las normas éticas conducirá a conductas antisociales, de dependencia a la ley y a la destrucción de la paz; robaré la idea de un Investigador en Educación: Gilberto Guevara Niebla, quien aseveró que en la sociedad es mejor vivir por el espíritu y no por la ley.
Esta guía lleva una intención: difundir y reforzar los valores éticos para fortalecer el respeto a las personas y a sí mismo, la dedicatoria es implícita; romper con una tradición neoliberal, misma que ha imperado desde hace aproximadamente cuarenta años; esto implica mermar el enorme poder que han tenido unas cuantas personas y, que han vivido con muchos privilegios. Hoy se pretende que la economía se acomode a la población, para tal efecto, habrá que disminuir la enorme corrupción que tanto afecta a la sociedad.
El principio que fundamenta y explica la intención de esta guía ética, es, evitar que se siga descomponiendo la sociedad, ello puede ser posible si se incorporan a la dinámica social normas de conducta que surjan de la reflexión sobre temas de moral social. En sí, se pretende que se construya y adopte una nueva guía ética que sea consecuencia de acuerdos, no de imposición ni cohesión; el fin último es el encontrarle rumbo a la cuarta transformación impulsada por el Presidente de la República y, como principio fundamental, es erradicar la corrupción -¿será posible esto?-; si se logra realmente humanizar a la sociedad, podremos asegurar que se dio realmente una revolución de las conciencias.
Sobre la guía:
Por el contenido de las propuestas de la guía, todo hace suponer que el voto emitido por la población y donde se proclamó como Presidente de la República a AMLO, fue insurrecto, dado su alto contenido de civismo y solidaridad. Legítimamente, no fue triunfo de un partido político sino de una organización y movimiento social; legalmente ganó un partido político, lamentablemente, no existe ni la más mínima manifestación de civilidad de parte de un gran número de militantes del partido triunfador. Este sistema de gobierno ha denunciado de manera frontal, el alto nivel de corrupción que existía, que incluso, todavía existe tal vez en un nivel más bajo. Esta guía ha puesto a temblar a muchos puesto que, lo que se espera es que la población tome conciencia y denuncie, en lo sucesivo, cualquier caso de corrupción.
Hasta el momento, la guía ética es la manifestación de un interés presidencial, se espera que con el tiempo, llegue a ser del dominio público y, pueda así, legitimarse como tal. A decir del presidente de la República, lo que orilló a postular esta guía, es la enorme descomposición social que vive el país. Es menester, dice el alto mandatario del país, cultivar toda una serie de valores, aclara además, que la guía no es de ninguna manera una imposición, sino un documento que sirve y llama a la reflexión, que la publicación más bien sirva para que se debata; insiste, con esta guía se pretende desplazar y erradicar a los corruptos. Como exhorto tiende a que se otorgue el perdón a los infractores, aunque existen diferentes niveles de infracciones. Gabriel Vargas Lozano expresa: “Frente a la violación y asesinato de una hija, el asesinato de un familiar o el plagio de un joven para la venta de órganos, entre otros ejemplos, ¿otorgaremos el perdón? (La Jornada México. 07/dic/20, p.26)
