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martes, 19 marzo, 2024
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Mi reto a las empresas mineras ante el impuesto ecológico

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Por: ÁLVARO GARCÍA HERNÁNDEZ •

…El mundo es un lugar peligroso,
no a causa de los que hacen el mal
sino por aquellos que no hacen nada para evitarlo…”

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Albert Einstein

Desde la Colonia, el estado de Zacatecas ha sido explotado en sus recursos minerales y pese a tantos años de saqueo a cambio de nada, nuestra tierra colorada sigue generando que muy pocas bolsas se llenen de miles de millones de pesos, heredando a nuestro pueblo problemas de salud, muerte, abandono y problemas intergeneracionales de contaminación al entorno. Son testigos de lo anterior, los niños que han nacido con anencefalia, las tierras infértiles, los mineros enfermos y los que están en el más allá esperando que se les haga justicia. Así, la minería ha sido el pretexto para fundar y desfundar pueblos y comunidades que al término del beneficio del mineral se han quedado en el olvido; recordemos la historia de San Felipe de Nuevo Mercurio, Mazapil, que traza a la perfección lo que pasa y pasará, cuando los empresarios mineros vean satisfechas sus pretensiones económicas. Reto a las empresas mineras y a sus dueños millonarios a debatir sobre la conveniencia o no del impuesto ecológico, pero no aquí en la capital en la comodidad de algún café o restaurant de moda, los reto a ir a Nuevo Mercurio para que conozcan de cerca lo que opina la gente a la postre del auge minero, cuando todos se van y las paredes de sus casas se destruyen; escuchen al pueblo que ha tenido la mala suerte de encontrarse con el espejismo de la abundancia y el progreso; si quieren, se van en helicóptero mientras yo recorro más de 70 kilómetros de terracería en cuatro horas, mientras llego, hagan un tour turístico por las minas que fueron explotadas por John Nugent dueño de la empresa Rocicler, personaje que al final de aprovechamiento del mercurio, nos heredó un tiradero de bifenilos policlorados donados en 42 tambos de 200 litros cada uno, recipientes que fueron tirados al interior de las minas, para posteriormente ser extraídos gracias a la ignorancia de la gente y ser utilizados como cercas y contenedores de agua. Entre 1940 y 1970 San Felipe de Nuevo Mercurio llegó a tener 10,000 habitantes y ahora, debido a la escasez de oportunidades, su población ha disminuido en más del 95%. Hoy, la comunidad padece entre otras cosas, el agotamiento de los recursos hídricos (las pocas afluentes son saladas), la falta empleo, de servicios públicos y pobreza extrema. En este lugar, lo pobladores aspiran a cosas imposibles como tener agua potable, contar con vías de comunicación adecuadas, un transporte público de calidad, seguridad pública y servicios de salud eficientes. Después de debatir en esta región, le seguimos en el municipio de Noria de Ángeles, para que platiquen con las madres que han parido niños sin cerebro a consecuencia de la contaminación minera, dialoguemos con los campesinos que deberán esperar más de 100 años para volver a cultivar sus tierras ya que los jales mineros han impactado negativamente el territorio; visitemos también si nos dejan entrar, el gran cráter artificial que amenaza con llegar a China y seamos testigos del gran subdesarrollo que se ha propiciado en esa región, después de que los lugareños se limpiaban el trasero con plata pues estaba a flor de tierra. En dichos debates, analizaremos también el ícono de la política ambiental alonsista, su parque centenario que para mi constituye un monumento al olvido de los principales problemas ambientales de la entidad, pasando por la estrategia de la SAMA que pretende resolver el problema hídrico de Zacatecas con dibujos y asoleadas de los niños de preescolar. Entonces, este paraíso terrenal que nos han heredado, se presta para que vengan a saquear nuestra riqueza natural a cambio de nada, pasándose por el arco del triunfo las declaraciones de la Cumbre Estocolmo sobre el Medio Ambiente Humano de 1972, la Cumbre de la Tierra de 1992, la Cumbre de Johannesburgo de 2002 y la última evaluación internacional de Río de Janeiro de 2012, en donde se concluye que estamos edificando un mundo con devastación ambiental en detrimento de la calidad de vida de las futuras generaciones en las que van incluidas, las de Usted señor empresario minero, aunque claro, tal vez sea mejor buscar minas en otros planetas porque este será muy malo para la salud de sus juniors; en tanto, siga regateando el impuesto “simbólico” ecológico y envíe a los trabajadores mineros como carne de cañón para bloquear caminos. Nadie antes se ha hecho responsable por tanto impacto ambiental que han inferido al estado por lo que llegó la hora se servir unas cuantas gotas en la copa de mi querido Zacatecas aunque no representen el océano de riquezas que se han llevado de nosotros. ■

*Integrante del Consejo Mundial para la

Defensa de los Derechos Humanos

 

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