Mérida, Yuc. La estancia del presidente de Cuba, Raúl Castro, en Mérida, tierra que conoció hace 60 años cuando era un perseguido político de la dictadura a sus 24 años, terminó exactamente a las diez de la mañana cuando el convoy de vehículos y patrullas que lo condujeron a la base aérea partió del hotel donde pernoctó anoche.
La bella casa de un comerciante de la industria henequenera en la colonia García Ginerés albergó a Castro y su equipo de trabajo. Esta mañana no hubo ninguna actividad oficial en su agenda.