La Gualdra 341 / Séptimo Aniversario Gualdreño
Palabras más, palabras menos, he escuchado a los fotógrafos decir que una imagen se captura no sólo con su lente, sino con todos los libros que ha leído quien dispara la cámara, todas las películas que ha visto, los sitios que ha conocido, la gente con la que ha hablado.
Es verdad. Lo es no sólo para ellos, los maestros de la lente, también es así para quienes escriben, quienes bailan, actúan, manejan un taxi, o atienden un bar, etcétera.
«Somos lo que hacemos para cambiar lo que somos», decía Galeano parafraseando Sartre. Somos pues el arte al que hemos accedido, el que hemos buscado, el que nos han facilitado.
Soy «Naturaleza muerta y Biblia» de Van Gogh, que me ha calado tan hondo como para desbordar mis lágrimas.
Soy «La Piedad» de Miguel Ángel que me enseñó que la belleza y el dolor caben en la misma piedra, y que en ella puede expresarse lo que a veces escapa a las palabras.
Soy La Basílica de San Pedro que me hizo sentir que Dios existe, y también la Sagrada Familia que me hizo pensar que ese Dios sonríe mucho más de lo que pensamos.
Soy «El Cascanueces» que significó la sensibilidad que tardé tanto en comprender; es también mi hermana en armonía, estética y porte que siempre me serán ajenos y envidiables.
Soy «Wenses y Lala» que me han contado la mejor historia de amor que he escuchado, que me quebró de risa y llanto en el filo de una butaca. Soy «La espera» que en voz de actores del teatro penitenciario me enseñaron que estaba tan presa y tan libre como ellos. Soy «Oleanna» que aún resuena en mi cabeza.
Soy Tchaikovsky y el final de la película «El Gran Concierto» que se conectan hasta lo más profundo de mí, que me hacen sentir viva y mejor aún, me hacen valorar cada instrumento que suena en la sinfonía con la que vivo mi vida.
Soy «El llano en llamas» que me hace sentir que no hay nada, ninguna letra, ninguna palabra que falte por escribirse.
Soy yo en estos siete años de La Gualdra, en los que he podido conocer un poco más del mundo, y en los que me han permitido explorar un poco más de mí.