■ Se deben consumir los tres grupos de alimentos: verde, amarillo y rojo
Para la recuperación de los pacientes de Covid-19 en su casa, son importantes sobre todo los factores de la alimentación y la activación física, sin embargo, dado que las secuelas son marcadas, no es recomendable la actividad cardiovascular pero sí mantenerse activo, en tanto que en la alimentación, de acuerdo con Lilia Hernández Alvarado, coordinadora del área de Nutrición en la Oficina de Representación del IMSS en Zacatecas, debe ser completa y variada con base en el Plato del Bien Comer con sus tres grupos de alimentos.
La combinación de estos dos factores, si se atienden correctamente, permitirá que los pacientes infectados por Covid-19, tanto hospitalizados o en aislamiento domiciliario al ser dados de alta, puedan recuperarse satisfactoriamente, explicó la especialista, esto además de atender las recomendaciones médicas que les indiquen.
Sobre la alimentación recomendada para las personas convalecientes, Hernández Alvarado detalló que debe ser completa y variada, además de estar basada en el Plato del Bien Comer con sus tres grupos de alimentos que son el verde, amarillo y rojo.
El verde, precisó la especialista en nutrición, está compuesto de frutas y verduras, las cuales se recomienda que sean consumidas crudas y con cáscara para tener un buen aporte de vitaminas, minerales y fibra; el amarillo corresponde a los cereales como el amaranto, avena y pan integral, no obstante, indicó que se deben evitar galletas y harinas refinadas, así como pasteles, esto debido al alto contenido de azúcar.
Y por último, el grupo rojo es aquel que integran las proteínas de origen animal, como carnes rojas, pollo, pescado, huevo, leche y queso; así como proteínas vegetales contenidas en las leguminosas, como el frijol, haba, garbanzo y lenteja. Dichos alimentos, aseveró, tienen gran aporte de fibra y de hierro para mantener un sistema inmune fuerte.
Por tanto, reiteró, cada comida debe incluir alimentos de cada grupo y complementarlo con una buena hidratación a través del consumo de seis a ocho vasos de agua potable simple, y mantener la actividad física en la medida de lo posible, es decir, no con actividad cardiovascular ya que se dificulta un poco, pero sí lo más activos posible.
Hernández Alvarado explicó que durante la convalecencia la actividad física dependerá de las condiciones del paciente, pero se puede iniciar con periodos de 10 a 15 minutos de ejercicio como repetición de sentadillas, desplantes o ejercicios para activar la movilidad de los músculos, pero que no impliquen un esfuerzo físico grande.
Las recomendaciones señaladas por la coordinadora del departamento de nutrición son útiles para la población en general porque asegura que ayudan a prevenir enfermedades a través de una buena alimentación que le permite al sistema inmune estar en las mejores condiciones, y en estos casos, prevenir complicaciones de resultar contagiados de Covid-19.