■ Filiberto Rivera pretendió que se avalara ese pago dos meses después de que fue erogado
■ Arturo García, secretario general del Sdytitsf, afirmó que Jiménez Álvarez incurrió en nepotismo, pues incluyó en la nómina a alrededor de 20 familiares y amigos
Documentos obtenidos por La Jornada Zacatecas vía acceso a la información pública revelan que la Junta Directiva del Instituto Tecnológico Superior de Fresnillo (ITSF) no autorizó la compensación de 390 mil pesos que percibió el ex director Hugo Jiménez Álvarez, además de que Filiberto Rivera Medellín, entonces encargado del despacho de Dirección, pretendió que ese organismo avalara ese pago dos meses después de que fue erogado.
Los documentos suscritos por Rivera Medellín señalan que el 31 de marzo del 2015, el ITSF realizó el pago de 390 mil pesos a Jiménez Álvarez por concepto de “Compensación para función de director”, monto que se redujo a 274 mil 899 pesos debido a la retención del Impuesto Sobre la Renta (ISR).
El acta de la sesión de la Junta Directiva, realizada en mayo de ese año, expone que no hubo punto de acuerdo respecto a la solicitud del encargado del despacho de la Dirección de autorizar el pago de dicha compensación, aunque este ya se había realizado dos meses antes.
Por su parte, Arturo García, secretario general del Sindicato de Docentes y Trabajadores (Sdytitsf), afirmó que Jiménez Álvarez incurrió en nepotismo, pues incluyó en la nómina a alrededor de 20 familiares y amigos: hermanos, primos, yerno, compañeros de su grupo musical e incluso el hijo del periodista Humberto Cázares.
Entre ellos mencionó a su hermana Teresa Jiménez Álvarez, su yerno Juan Carlos Guerrero Venegas, a sus primos Roberto Jiménez de la Rosa, Carlos Jiménez y Karla Álvarez Gallegos, y a sus compañeros de agrupación musical Efrén Rivera de León, Mario Alberto García Camacho y Rogelio Aguilar Solís.
Cuestionó que muchos de ellos pertenezcan al otro sindicato que hay al interior de esa institución, puesto que ocupan cargos de confianza en el Instituto o bien están contratados por honorarios.
Mientras tanto, el Sindicato de Trabajadores (Stitsf) tomó este jueves las instalaciones de esa institución para exigir la reinstalación de ambos ex funcionarios, además de que denunció acoso laboral de parte del actual director, Mario Dévora Méndez, del que exigió su destitución.
César Guijarro Rodríguez, secretario general de este gremio, informó que el paro de labores se realizó “para denunciar públicamente las arbitrariedades y exceso de autoridad que Mario Arturo Dévora Méndez está ejerciendo en contra del personal del Tecnológico; ya que en apenas un mes que asumió la Dirección General de nuestra casa de estudios, en lugar de dedicarse a administrar la institución (completar las cargas laborales de los docentes, asignar maestros a los alumnos que siguen sin recibir clases, dar seguimiento a los procesos académicos y administrativos) se ha dedicado a perseguir a varios compañeros de manera injustificada y con la clara intención de acosarlos laboral y psicológicamente”.
A través de un comunicado suscrito por los integrantes del Comité Ejecutivo, señaló que el actual director del ITSF, Mario Dévora Méndez, recientemente ocupó ese mismo cargo en la preparatoria 3 de la Universidad Autónoma de Zacatecas (UAZ) “y fue destituido por demostrársele el autoritarismo, las irregularidades académicas y administrativas, y la conducta de acoso a las alumnas y alumnos de dicho plantel”.
Expuso también que el paro laboral realizado en el ITSF, el lunes y martes pasado, fue obra del mismo director, “quien en un acto de desesperación, y en total desacato de la Autoridad Estatal de reinstalar a los compañeros despedidos, se auto-toma el tecnológico con apoyo del sindicato del que aún toma funciones como Secretario General”.
Ante esa situación, Guijarro Rodríguez exigió la destitución inmediata de Mario Arturo Dévora Méndez “por el evidente exceso de funciones y desacato de autoridad”, la reinstalación inmediata de Hugo Jiménez y Filiberto Ribera y la instalación de una mesa de diálogo entre la autoridad gubernamental y los sindicatos del tecnológico, para equilibrar el trato y poner fin a las controversias suscitadas.
