Recuerdo que en la secundaria leía unos libros que escribía Rius, eran libros que tenían como título para ignorantes, eran como introducciones a varios temas más complejos como la economía y la filosofía, eran una forma de saber sobre temas y empezar a indagar sobre los mismos, obvio tenían los personajes de Rius, ahora es más fácil buscar información sobre cualquier tema, existen blogs y páginas sobre cualquier cosa y tutoriales sobre varios oficios, tanto así que un participante olímpico bajo tutoriales de lanzamiento de jabalina para entrenar, hoy en día podemos ser autodidactas casi de cualquier oficio, en lo personal me gusta bajar esa información, también podemos bajar libros de manera gratuita en PDF, prefiero los libros físicos, pero ésta es una buena opción cuando no se encuentran o cuando no se tienen los recursos, hay libros gratis que en una librería rebasan los $1,000 pesos, es por eso que no entiendo ¿por qué vivimos en un país de gente tan ignorante? La verdad no quiero ofender a nadie ni siento tener un criterio muy amplio de las cosas que pasan, al contrario, me siento en un nivel muy promedio y por lo mismo cuando veo el modo de opinar o comportarse de las personas, me doy cuenta de que tienen criterios muy por debajo de la media, conozco gente que no tiene idea de dónde vive o cómo vive, es por eso que le es muy fácil al gobierno y a los monopolios manipularnos a su antojo.
Hace como un año salió en Internet un artículo donde decía que México es el país más ignorante del mundo, mucha gente lo compartió y pues despotricaron en contra del país y su ignorancia, de la educación pública y bla bla bla, de lo que me di cuenta es que rara fue la persona que en verdad se puso a leer el artículo, en realidad no hablaba del nivel académico de los mexicanos, era una investigación a nivel mundial donde descubrieron que los mexicanos somos las personas menos informadas de lo que pasa en el mundo y en nuestro propio país, tanto así que tomamos como ciertas cualquier nota que vemos publicada en Internet, nuca investigamos la fuente o la noticia completa, de esto nos podemos dar cuenta por cómo se mueven las tendencias en redes sociales, los temas que siempre se debaten son temas sin mucha relevancia, ejemplo el caso de la gimnasta con sobrepeso, en estos momentos es una tendencia en Internet, ok si fue mala onda que se burlaron de ella y los comentarios tampoco fueron muy agradables para alguien que nos representó, pero lejos de todo esto, la mayoría de nosotros ignoramos la situación del deporte confederado en México y no tenemos idea de quienes son nuestros dirigentes ni cuanto gasta la Conade en los deportes confederados, tampoco saben en qué deportes participamos, estadísticas o datos básicos, esto es solo un ejemplo no quiero abundar en el tema, es solo para demostrar como siempre opinamos de temas que desconocemos y lo peor los temas de los que debemos estar enterados, no sabemos ni que existen, las redes sociales se han convertido en otro instrumento del poder para manipularnos, el gobierno se dio cuenta que es un medio de difusión más efectivo que la televisión, también es anónimo, el gobierno y partidos políticos invierten mucho dinero en Bots o cuentas falsas de Twitter y Facebook, estas cuentas sirve para cambiar tendencias, también para inclinar la balanza de la opinión pública a donde más convenga.
El siglo pasado muchos intelectuales y escritores como Orwell y Bradbury ya vislumbraban un futuro así, porque no solo en México pasa, es un fenómeno mundial, vivimos en la época de la información pero pocas son las personas que la aprovechan, nos volvimos tan egocéntricos que basamos el autoestima en likes de face, muchas veces se pierde la dignidad solo por ser populares un instante en la red mundial, por eso vemos personajes como los #lords y las #ladys el fenómeno viral que comenzó con personajes como el Fua que se hizo famoso por un video en Youtube, cada día es más común o ver gente tan patética que sube fotos en situaciones denigrantes y lo último el pantallazo de conversaciones privadas que han lanzado a la fama a personas como #ladyComa, no digo que no tomemos a broma la vida o ciertas situaciones, pero la verdad nos convertimos en personas que nuestra fuente de información es el meme, pero bueno esto solo es una reflexión de cómo estamos asimilando la época en que nos tocó vivir.
Esta vez me despido recomendándoles que lean el libro de Fahrenheit 451 de Ray Bradbury. ■
