■ Gestora cultural considera innecesarios los recientes trabajos al interior de la Catedral
■ No hay que saturar los espacios públicos, se requiere de un plan para el Centro Histórico, comenta
“Esta ciudad está mal gestionada de todos sus recursos culturales y nos hace falta diálogo con los especialistas, las instituciones, con la sociedad”, afirma la historiadora María del Carmen Reyes García.
En sustento de su dicho, la integrante de la Asociación de Historiadores Elías Amador AC, recuperó la reciente manifestación pública de enojo de Sigifredo Noriega Barceló.
El obispo de la Diócesis de Zacatecas manifestó su indignación por no haberse tomado en cuenta las necesidades de su feligresía al instalar andamios dentro de la Catedral basílica por parte de la Sinfra, mintiendo dijo, sobre el cumplimiento de las fechas de terminación de las obras y por tanto, obstruyendo la realización del culto en una época que el prelado subrayó como de principal importancia para esta religión.
A diferencia del Antiguo Templo de San Agustín, observó Reyes García, por su parte, la Catedral de Zacatecas mantiene en la actualidad su función social de espacio de culto.
De tal manera, expuso, debe haber “un punto medio entre las decisiones de Gobierno y las necesidades de la sociedad que habita los espacios de la ciudad”, en este caso, de un Centro Histórico declarado patrimonio cultural de la humanidad por la Unesco.
El edificio, subrayó, no requiere más remiendos sino “un buen proyecto para que deje de desmoronarse constantemente, por así decirlo. ¿Cada cuándo tenemos andamios allí?”.
En un afán orientado de manera equivocada a desarrollar el turismo cultural, observó, se centraliza la oferta para este propósito en Plaza de Armas.
El efecto produce daños patrimoniales a la estructura de esta construcción que data del siglo 18, y es representativa por la riqueza ornamental de su fachada del Barroco exuberante y a la par, emblemática de una época zacatecana de auge minero.
En esta equivocación administrativa de los bienes culturales de Zacatecas agregó, se habla del éxito de un espectáculo, citó para el caso del Festival Cultural, cuando Plaza de Armas “está a reventar”.
No obstante, precisó, uno de los criterios a atender bajo el concepto de turismo cultural, es justo, el evitar la sobrecarga de los espacios, pues de ello derivan daños producidos por el exceso de gente y las vibraciones que generan los altos decibeles en la sonorización de los eventos, entre otros.
Reyes García, también gestora cultural, quiso con motivo de este reciente episodio, “hacer un llamado de atención a cuidar esa catedral”.
“Luego vienen a remozarla otra vez. No hay un análisis, no se publica el daño real de la catedral. De verdad tiene un problema. Se debería gestionar mejor el patrimonio cultural”.
Será lamentable, añadió, el momento en que se declare la existencia de un daño estructural serio, producto de una mala administración, y que terminará siendo un problema de quien esté al frente de la misma.
Al respecto mencionó ha conversado con gente del Instituto Zacatecano de Cultura y le señalan como responsables de las obras a la Secretaría de Infraestructura (Sinfra) o el Instituto Nacional de Antropología e Historia, o bien, señala, platica con personal de la Secretaría de Turismo proponiéndoles que establezcan vínculos con el IZC ,“y dicen que Cultura y Turismo son aparte”.
Por ello dijo, si “estamos ofreciendo cultura para atraer turismo yo creo que hay que empezar un proyecto donde vayan juntos”.
Agregó es necesario hacer partícipe de ello a la sociedad civil, “porque finalmente es la que habita y transita estas calles “. De los servidores públicos dijo, no se espera que sean especialistas en estos temas pero sí que escuchen a quienes lo son.
En este sentido, enumeró la existencia de entre otras organizaciones la asociación civil Amigos del Patrimonio, la propia Asociación de Historiadores Elías Amador o el Colegio de Arquitectos, por citar algunos.
Propuso como necesario “desmonopolizar los proyectos”, pues año con año recaen en las mismas personas o bien se encomiendan a los que denominó “especialistas de olla exprés”, consultores que sin tener el perfil ni la experiencia son contratados en sustento de compadrazgos o amiguismos.
Como soluciones al problema de empatar la funcionalidad actual para los pobladores con la conservación y preservación de su patrimonio cultural, dijo es necesario en principio formarse y actualizarse en estos temas que otros países como España han resuelto bien. Y no simplemente copiar, como se hace actualmente.
Se requiere asimismo se atienda a la concreción de un Plan de Manejo del Centro Histórico de Zacatecas, que implique más que remozar siempre las mismas calles y atiborrarlas de luminarias, extienda su atención hacia los límites de la zona motivo de la declaratoria por la Unesco, esto es, las cercanías con el inicio de los barrios antiguos de la ciudad de Zacatecas.
Este tipo de ejercicios deben ser sustento de una toma de decisiones en que deben participar en conjunto la sociedad y los gobernantes, y evitar aquellas que se imponen de manera unilateral por los administradores de los bienes públicos.
No se trata de tener una ciudad museo ni de arrasar con el patrimonio cultural como ocurrió en el denominado Guadalupazo, dijo. “Hay un punto medio, siempre debe existir”.
