Actores políticos y usuarios de redes sociales cuestionaron el uso de espacios gubernamentales y legislativos para llevar a cabo fiestas o celebraciones privadas, tal como trascendió en el Congreso del Estado y en las instalaciones de Desarrollo Integral para la Familia (DIF) municipal, hecho que calificaron como “frívolo” y ajeno a los preceptos de la Cuarta Transformación.
Luego de darse a conocer que la diputada Fernanda Miranda, hija del secretario de Economía, Jorge Miranda, llevó a cabo su “baby shower” en un recinto legislativo, diversos actores manifestaron su desacuerdo.
También han circulado fotografías del “baby shower” de Karla Estrada, esposa del alcalde de la capital del estado, Miguel Ángel Varela Pinedo, el cual se realizó en las instalaciones del DIF municipal.
Al respecto, Rubén Flores Márquez, presidente del Consejo Estatal del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), afirmó que uno de los objetivos de la Cuarta Transformación es dejar a un lado la frivolidad y el beneficio propio a costa de los recursos públicos.
Por tanto, si es real la información de que diputados efectuaron una celebración en un espacio del Congreso estatal, “lo reprobamos” porque no es parte de los principios de Morena a nivel nacional.
En caso de que los partidos políticos aliados a Morena puedan tener otra visión o perspectiva, reiteró que en la Cuarta Transformación no se comparte, ni apoya ni reconocen estas acciones.
No obstante, Flores Márquez indicó que hay ocasiones en donde los medios de comunicación, de manera tendenciosa, buscan cualquier resquicio para desvirtuar y desacreditar al movimiento de Morena, pero “nuestra lucha es por los principios de no mentir, no robar y no traicionar al pueblo”.
Por último, hizo un llamado a los servidores públicos, ya sean diputados, presidentes municipales, funcionarios, gobernadores, no incurran en acciones banales porque estas no caben en su movimiento.
En redes sociales, la reacción de la gran mayoría de los usuarios fue de molestia y cuestionamiento, ya que no se deben utilizar espacios legislativos o gubernamentales para organizar celebraciones privadas; otros más lamentaron que los legisladores leven a cabo esas actividades en horario laboral y hagan mal uso de espacios públicos.