Quizá no haya en el firmamento nacional e internacional un político tan desprestigiado como el panista Ricardo Anaya, astuto y eficaz para la transa, fue acusado hasta por sus mismos esbirros de alta corrupción, enriquecimiento ilícito y lavado de dinero.
La evidencia criminal en su contra es innegable: siempre por la vía plurinominal, siendo diputado federal recibió grandes cantidades de dinero de empresas extranjeras para ser gran palero de las 13 reformas estructurales de Peña Nieto -energética, educativa y telecomunicaciones- y que le darían supuestamente al país muchos beneficios. Todo lo contrario.
En contubernio con lo más sucio de sus compañeros y amigas del partido, en franca alianza con el panismo naranja de movimiento ciudadano y el extinto PRD, Anaya Cortes -49 años, clave 12 en la numerología, 18 letras en su nombre- jugó sucio en todas sus alianzas y estrategias y bajo la lógica simplona de infamar, mentir, engañar, engatusar con su supuesta buena oratoria y que no es más que un intercambio de orgias verborreicas en pos de hacer negocios con fincas, ser dirigente nacional de su partido, candidato perdedor a la presidencia de la república y hoy coordinador de senadores y senadoras de su partido.
Amparado bajo el fuero constitucional, regresó al país luego de haber huido del país en un vuelo privado desde Reynosa Tamaulipas rumbo a los Estados Unidos, su yerta relevancia consiste en dar conferencias matutinas en donde fija posiciones por demás risibles y consistentemente acusar de que Morena y su militantes tienen alianza con el narco, lo mismo y muy reiteradamente la presidenta Claudia y el señor obrador, cuando el mismo Calderón como presidente espurio, puso a Genaro García Luna como estratega principal de seguridad y aliándose directamente con los carteles del narcotráfico.
Es de fama mundial esa felonía, ese contubernio, idilio diabólico y desatando un baño de sangre que aún no termina.
El mundo al revés. Grotesco.
¿Qué depara para este señoritingo los próximos días, meses y años en la convivencia política de los mexicanos?
Los sondeos nacionales auguran que será objeto del peor de los descréditos por su perfil siempre bravucón y con su doble moral pervertida, la agenda política de los panistas es desaparecer en medio de gritos y trepándose en tragedias o yerros de la administración, cuidar sus descomunales riquezas mediante la ofensa, la tergiversación, la burla y el griterío impúdico y envenenando el debate público para sacar supuestamente raja política y de continuar insensibles siendo orgullosamente “de una derecha revolucionaria!” en una comicidad involuntaria pero aterradora por su falta de imaginación y con fines siempre electoreros.
Clave 12: única en el calendario nacional onomástico, es decir, solo los que nacen un 25 de febrero poseen estas características: “tienen facultades de mando, transitan su vida teniendo tacto y despertando simpatía”. 18 letras: “tendrá problemas en equilibrar su vida material con la espiritual, luchas y contratiempos”. Perfeccionista. fluctúa a menudo en sus estados emocionales, casi siempre responde con un no inmediato ante cualquier proposición, debe evitar ser haragán, crítico y excéntrico.
Ricardo Anaya Cortés, mofa, ruindad humana, político estafador en contubernios, fraudes y alianzas impensables, entre la corrupción, el soborno y los restos pestilentes de una era realmente aterradora para el pueblo mexicano: el panismo traidor a la democracia.