No se aprecia el valor del agua
hasta que se seca el pozo.
-Anónimo.
En nuestro bello pero seco estado de Zacatecas, estamos a punto de llegar a la hora cero en abasto de gua potable… y no solo del abasto, la realidad es que en el subsuelo, los mantos freáticos están casi vacíos, es lógico, estos se recargan con la lluvia y la filtración del agua de la superficie al subsuelo, luego estos mismo mantos freáticos, rellenan los pozos de abastecimiento que se encuentran a las afueras de las zonas o municipios, en esta ocasión nos vamos a concentrar en hablar de la zona con mayor estiaje hídrico del estado, la zona metropolitana Zacatecas-Guadalupe.
Cuando los pozos de abastecimiento tienen agua, surten a diferentes dispensadores del vital líquido, normalmente tanques elevados en los cerros más altos, para qué, por medio de gravedad, abastezcan a las colonias del valle de Zacatecas y Guadalupe. Le orografía hasta aquí, es un tanto benévola con la región. Pero el clima… El clima en los últimos años ha cambiado y con ello han disminuido los fríos, se han intensificado los calores y las lluvias son prácticamente inexistentes.
De nada sirve tener cerros altos con tanque elevados y una gravedad envidiable, si no podemos tener agua en las casas. No exagero, me ha pasado en mi hogar, conozco cientos de casos en los que la falta de agua es ya una realidad. Si te llega el agua cada 8 o hasta 15 días, en realidad no tienes agua y esto pasa con más frecuencia de lo que pensábamos, hasta que los valientes vecinos del fraccionamiento el Dorado, en Guadalupe, salieron a bloquear solidaridad. En los casos menos graves, lo que ocurre es el famoso “Tandeo”, donde un día sí y un día no tendrás abasto de agua, pero la realidad es que el esquema del “Tandeo” ni es el ideal, ni funciona, ni llega cada tercer día y menos es una solución. Es simplemente un síntoma del problema, y ese problema, por lo menos en gran medida, es la Red Hidráulica de nuestra capital. Esa red, en algunos casos, tiene más de 50 años y es como un balón de futbol de los niños del barrio: parchado hasta más no poder. Evidentemente al bajar por gravedad el agua de los tanques elevados, se fuga o se treuna en determinada línea de determinada colonia y hay que cortar el servicio para parchar y no desperdiciar, esto tarda a veces días, y genera que no llegue agua a las colonias que se abastecen por esa línea.
Por si esto aún resultara fácil de resolver, hay que volver al origen, la realidad es qué hoy, sí tenemos agua, pero en 10 o 15 años o quizás menos, no la tendremos; y es que el 85% del agua que tiene Zacatecas en el subsuelo, se utiliza para riego en el campo; del 15% restante, 7.5% se desperdicia en fugas y el 7.5% restante, es agua efectiva. He aquí, el verdadero problema. Que los porcentajes de agua efectiva para abastecimiento no son los ideales.
¿qué hacer?
La ciudadanía merece gobiernos con visión a largo plazo, que no solo parchen el problema de manera provisional. Por eso, el problema del agua y el derecho universal a su acceso, consagrado en la Constitución, se debe asegurar en lo inmediato y a 50 años mínimo.
Si se cambia la red hidráulica de abastecimiento de la capital, aunque sea por partes o zonas, vamos a poder tener el doble de agua de lo que hoy tenemos, simplemente por ya no tener fugas. Esto quiere decir, que tendríamos el 15% de agua eficiente para satisfacer el servicio. Para hacer realidad esta solución a corto plazo es necesario que los municipios que integran la junta intermunicipal de agua potable, JIAPAZ, el gobierno del estado y el federal por medio de la CONAGUA, diseñen o retomen un proyecto integral, bajo el esquema económico de las contrapartes, porque es sumamente costosa la rehabilitación.
A mediano y alargo plazo, la única solución viable, dadas nuestras circunstancias geográficas y de clima, es sin duda la Presa de Milpillas. El proyecto fue ideal desde el principio, pero los intereses políticos y económicos pudieron más. Es muy importante que el próximo gobernador retome el tema y la gestión del recurso en la federación. Esta solución pondría fin a la dificultad con la que se extrae actualmente el vital liquido y permitiría recargar los mantos freáticos.
En materia de agua y viéndolo como un derecho universal y una obligación brindar el acceso y el servicio, o actuamos ya o la revolución social la vamos a ver en nuestras calles, alimentada por nuestros vecinos de nuestras colonias.
No hay tiempo que perder, escojamos a las y los mejores candidatos que se postulan para los diferentes espacios. En nuestra bella ciudad, un profesional, para la capital.
