Dicen que hay dos clases de pacientes covid: los que la tienen (o han tenido) y los que la van a tener.
Si todo sigue como hasta ahora, parece que eso será verdad. La Organización Mundial de la Salud estima que 10% de la población del planeta ya pasó por la enfermedad1 y aún no se cumple siquiera un año de su descubrimiento.
En esa sintonía está el empresario Ricardo Salinas Pliego, quien hace varios meses hacía abierta campaña contra las medidas dictadas por las autoridades sanitarias y la semana anterior informó con las siguientes palabras que había contraído el virus: “Con la novedad de que tengo #COVID19, así que a cuidarse y no tener miedo, como siempre lo dije… nos tiene que dar a todos y vamos a estar bien.”
Ojalá todos pudiéramos darnos el lujo de su optimismo. Pues aunque la enfermedad sea la misma, la desigualdad para enfrentarla es clara.
De por sí la probabilidad de contraer la covid es distinta. Con ligereza se tacha de irresponsable a todo quien sale a la calle aunque quienes lo hacen tienen el mismo miedo a la covid que el resto, pero tienen otro miedo mayor: el de que los suyos tengan hambre.
Desde la burbuja clasemediera podría decirse que hay alternativas para disminuir al mínimo las salidas. Se puede pedir comida en casa, hacer las compras por internet, leer, ver Netflix, charlar por zoom, etcétera. Olvidamos que esa comodidad existe gracias a millones de trabajadores para quienes el “quédate en casa” es imposible.
Si el contagio ocurre la brecha se amplía, pues aunque se supone que las pruebas PCR están a tan sólo una llamada al 911, son sabidos los casos de quienes no recibieron respuesta, no se les quiso hacer la prueba, o bien por riesgo a exponerse al virus en las salas de espera, optaron por vías tan disímiles como las Farmacias similares o el Hospital San Agustín.
Ante un diagnóstico, la posibilidad de seguir las indicaciones médicas puede también ser muy variable ¿En cuántos hogares es posible el aislamiento al interior del hogar? ¿Cuántos pacientes contarán con alguien que los asista durante la enfermedad?
Pensando en esos casos en la ciudad de México se instaló atención médica en el Autódromo Hernández Rodríguez. En Zacatecas no hay noticia de medidas similares.
Pacientes como Salinas Pliego tienen a su disposición termómetro, oxímetro, tomografías, médico especialista con visitas frecuentes, personal de enfermería permanente. Impensable para otros miles que tienen que confiar en detectar si hay oxigenación insuficiente, que consultan al Dr. Google, toman lo que le sirvió “al primo de un amigo”, y tienen por enfermera a un familiar que en el mejor de los casos sabe inyectar.
Ay de aquel que además requiera oxígeno en casa. Si no cuenta con seguridad social vivirá el calvario de buscarlo desesperadamente en comercios que se dan el lujo de cerrar el fin de semana; y vivirán la especulación de los precios de tanques y concentradores.
Si tienen la suerte de contar con seguridad social quizá entonces sólo requieran de tiempo, mucha paciencia, y algo de suerte para que haya abasto de lo que requieran.
Y si por fortuna todo saliera bien, entonces el paciente habrá perdido 22 días de trabajo (promedio de acuerdo a Gobierno del estado) en los que en muchos casos, además de los múltiples gastos, quizá haya dejado además de tener ingresos.
Sí, tal vez Salinas Pliego tenga razón y a todos nos va a tocar la covid por igual, pero hay unos más iguales que otros.
La semana pasada es hasta ahora la peor en materia de covid en Zacatecas. El número de contagios fue de 990 casos, equivalentes a más del 10% del total de los casos presentados en 25 semanas.
Sin contar a quienes se niegan a tomar la enfermedad con seriedad, seguramente hay miles de zacatecanos que anhelan poder quedarse en casa, que quisieran tener habitaciones extra para mantenerse retirados de sus familiares, que odian los desvelos, los cansancios, la angustia por la que pasan sus seres queridos, que lamentan con el alma la tormenta económica que implica la enfermedad. ¿Para todos ellos qué se hace? Los regaños y los llamados a permanecer en casa no bastan. ■
Notas:
1El Financiero, “10% de la población mundial ha tenido COVID-19, estima la OMS” 5 de octubre de 2020. Disponible en: https://www.elfinanciero.com.mx/salud/10-de-la-poblacion-mundial-ha-tenido-covid-19-estima-la-oms
