Sr. Presidente de la República:
Bienvenido nuevamente a Zacatecas. Es muy bueno que esté otra vez en esta tierra de gente buena en donde las adversidades no paran de afectarnos. Estamos pagando las consecuencias de que un sector de la población haya elegido a los gobiernos priistas durante los dos últimos sexenios en los que hemos sido testigos de la opacidad y excesos de los titulares de la Administración Pública Estatal en mancuerna con la desastrosa gestión de Peña Nieto. Usted ya conoce el gran adeudo y el retroceso económico y social que generó Miguel Alonso, a la postre uno de los gobernantes más corruptos de que se tiene cuenta en nuestro territorio. Obviamente, en la medida que se incrementó la corrupción aumentó la pobreza de miles de zacatecanos, las cifras son frías y se traducen en una insultante falta de oportunidades que en la región del semidesierto, agravian todavía más pues, hay niños sin posibilidad de estudiar, jóvenes que encuentran su destino en la fuerzas delictivas, mujeres que quedan heroicamente al frente de sus desarticuladas familias pues lo hombres van en busca de la pesadilla americana de la que algunos no vuelven jamás. Miguel Alonso nos heredó únicamente glorietitas a la entrada de cada cabecera municipal y, en su interior, pura miseria, falta de empleo y salarios raquíticos; la desesperanza prevalece en cada rincón del estado. Estamos a la espera de nuevos horizontes, queremos que la Cuarta Transformación llegue por este rumbo y que la Nueva Toma de Zacatecas, se traduzca en un beneficio económico para las familias, con una educación de calidad y fomento del empleo. Acá ya se nos hizo costumbre la miseria pues más de la mitad de los habitantes estamos muy fregados y, eso se lo debemos al PRI, pues como Usted sabe, este territorio era un bastión de ese partido político y a cambio, siempre estuvimos en el sótano del desarrollo como la Z, hasta la cola del abecedario; sin embargo, ahora ocupamos medalla de honor en los primeros sitios de la inseguridad, el secuestro, el desempleo, nulo desarrollo económico y para colmo de nuestros males, a Carlitos Slim le dio por ser minero y junto con otras empresas extranjeras, continúan con el saqueo de nuestra riqueza mineral a cambio de devastación ambiental, pueblos fantasma, niños que nacen sin cerebro (anencefalia) y graves daños al suelo y a la salud de la gente, colocándonos en el ámbito internacional como una vergüenza pues aquí, no se van a cumplir ninguno de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU, nuestro derecho humano al agua está en entredicho ante el agotamiento de los mantos acuíferos en más del 50%, lo cual, contrasta con la empresa cervecera instalada en Calera que agota los recursos hídricos superficiales de su alrededor. Sr. Presidente, llegó la hora de nuestro amado Zacatecas, ya estamos hasta la madre de tanto agravio, queremos que por fin nos haga justicia la 4T, anhelamos que termine este sexenio gris que no alcanzó a hacer nada por el pueblo; lo invito a vernos en algún crucero o cualquier semáforo para que se cerciore de que ahora, se pelea la gente por hacer malabares, tragar fuego, vender semillas y, hasta nuestros honorables tamborazos zacatecanos y mariachis, se disputan una moneda para llevar el sustento a su casa, la justificación ahora es la pandemia y si le sumamos la nula gestión que se hizo y la corrupción que se arraigó en Zacatecas, el resultado es caótico. Ojalá que su próxima visita sea a alguna demarcación del semidesierto, para que Usted sea testigo de cómo algunos hermanos viven en condiciones similares al África Subsahariana, bebiendo agua de charcos y bordos, con problemas de salud graves y con ausencia de servicios sanitarios humanistas y eficientes. Ya no nos alcanza la paciencia para otro sexenio igual, hay hartazgo y desesperanza por lo que no queda de otra más que hacer posible que a Zacatecas se le trate de otra manera y se visibilice a la entidad con una manera diferenciada en atención a cada región y su problemática. Por último, apelo en mi carácter de universitario a una mayor asignación de recursos para la Universidad Autónoma de Zacatecas, noble institución que abre sus puertas a las aspiraciones de los jóvenes y que cada año, la amenaza de su crisis financiera pone entredicho tanto los derechos laborales como el ingreso de más muchachos que aspiran a tener una carrera profesional, necesitamos crecer en instalaciones, recursos y en matrícula para que nadie se quede fuera de las aulas como una estrategia nacional de seguridad. Espero que el próximo año, las cosas cambien y que pueda yo, dirigirme a Usted con noticias halagüeñas. Un abrazo Presidente.
*Docente-investigador de la Unidad
Académica de Derecho de la UAZ
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