“Que cada palabra lleve lo que dice
que sea como el temblor que la sostiene.
Que se mantenga como un latido”.
Rafael Cadenas, poeta venezolano
Nuestro espíritu debe permanecer fuerte y vigorizando las medidas sanitarias ante la pandemia mundial. El ejemplo de Zacatecas, la semana pasada en naranja y ahora en rojo en el semáforo Covid 19, es una llamada de atención para la sociedad y el mundo en el que hasta el 9 de junio se registraron 7.04 millones de infectados y 404 mil decesos. En México van 124 mil casos confirmados y 14,649 muertes. En nuestra entidad el número se disparó a 418 contagiados y 55 decesos. Reflexionemos: lo difícil está por venir.
La semana se vistió de luto al perder a uno de los valores artísticos más importantes del siglo XX y lo que va del presente, Manuel Felguérez, a quien dedicaré la próxima columna. En esta edición concluimos lo referente al V Coloquio Internacional de la Crónica y Encuentro de Cronistas Universitarios, promovido por la Red Latinoamericana de Cronistas (Relac) y la Benemérita Universidad Autónoma de Zacatecas, a través de la Unidad Académica de Historia.
La satisfacción de la labor realizada culminó de forma gratamente sorprendente con el acopio de comentarios sobre las ponencias y el evento mismo. Este V Coloquio representa los máximos logros del trabajo de cinco años difundiendo la crónica latinoamericana y la participación de cronistas universitarios: se presentaron 40 trabajos, cuando el mayor número había sido 36; es el primero en el que participa Chile, y, respecto al territorio mexicano, el primero en que hay ponentes de Nuevo León, Tamaulipas y de la Universidad Autónoma Metropolitana.
Los trabajos se enviaron a 63 personas procedentes de Argentina, Chile, Cuba, Colombia, Ecuador, Guatemala, Venezuela y México; de este país tuvimos lectores en Ciudad de México, Chiapas, Estado de México, Hidalgo, Morelos, Nuevo León, Puebla, Tamaulipas y Zacatecas; hasta el 5 de junio de 2020 recibimos 272 comentarios; en muchos lugares la comunicación electrónica es limitada; por esa razón, seguimos recibiendo opiniones.
Los ponentes con más comentarios fueron: Alberto Velázquez López (14), de Cuba; Tomás Jurado Zabala (13), de Venezuela; Ricardo Hernández López (11), del Estado de México; Carlos Lavín Figueroa (10), de Cuernavaca, Morelos, México; Francisca Ariadna Ortiz Reyes (10) y Norma González Paredes (10), del Estado de México.
La experiencia de comunicación con cada uno de los ponentes e interesados en la crónica fue muy agradable; se constató que el espíritu del cronista es un torrente de motivación para defender los valores y el patrimonio, para promover la identidad y el orgullo de pertenencia. Solo nos queda agradecer a los copartícipes por afrontar la situación de contingencia con esa fortaleza de profesionalismo para asumir la responsabilidad que les es conferida: escribir la memoria histórica de su entorno.
Imposible condensar en un artículo el tesoro que representan los comentarios de los participantes; pronto verá la luz el informe crónica producto de este coloquio, por ahora, compartimos algunas opiniones:
“Para propiciar el recuerdo, para enaltecer la memoria, para acrecentar la identidad, para confirmar las representaciones sociales de todos y cada uno de los individuos que pueblan el universo en la noche de los tiempos se estableció la figura y las tareas de cronista. Por eso aquí están sus voces, su legado y sus folios”. Efraín Gutiérrez de la Isla (Zacatecas)
“Para mí fue un placer leer todos los relatos presentados por los participantes en este evento. Desde los que mencionan la labor loable de fomentar la lectoescritura a niños y adultos mayores, como los que describen su incansable recorrido para lograr sus metas o los que tratan de que se conserven las tradiciones en su comunidad (…)”. Irma Espinosa Rivero (Estado de México)
“(…) durante las lecturas de las ponencias del V Coloquio, voy sumando nuevas visiones de nuestros mundos, de sus historias, de sus costumbres y tradiciones, de sus personajes, palacios y murales, en ese interminable, pero siempre luminoso y fructífero caminar de cada cronista, de cada ciudad, de cada región y ciudad latinoamericana”. Óscar Efraín Albores Cancino (Chiapas)
“He tenido a bien leer la mayoría de las crónicas, las cuales he disfrutado, me han dejado enseñanzas relevantes y el interés por conocer más acerca de algunas temáticas descritas. Euda Morales (Guatemala)
(…) me pareció sumamente atractiva la manera como se planteó este año por la coyuntura que atravesamos y creo, como lo señala el colega Efraín Gutiérrez, de continuar los próximos encuentros con un apéndice de esta forma, si es que se va a dar de la tradicional, y difundir por diferentes medios para que haya mayor participación.
Belky Montilla (Venezuela)
Con un mensaje para todos concluyo con las palabras del doctor Víctor Luis Castellón Cervantes, estudiante de Historia de nuestra BUAZ: “La necesidad de la crónica universitaria me ha quedado clara. Como académico me mueve a la reflexión para activarme en este tema”.
Seguramente los espíritus de Chava Flores y de Carlos Monsiváis quedan complacidos en el infinito donde el arte de su quehacer como legado sigue prodigando amor por nuestro patrimonio nacional. Nos veremos en el VI Coloquio en el 2021.
Así se observa el mundo desde el Mirador de Heródoto.
*Cronista de la UAZ
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