■ “El fenómeno social viene desde la educación y sus manifestaciones pueden ir escalando”
■ La difusión de imágenes de feminicidios normaliza y le da difusión a este problema social
Laura Lecuona, feminista radical con estudios filosóficos, impartió un curso sobre feminismo radical para la Unidad Académica de Filosofía de la Benemérita Universidad Autónoma de Zacatecas (BUAZ), en él se tocaron temas desde lo que es el feminismo radical y un poco de su historia, hasta temas más actuales como el feminicidio y la violación, y lo que esto representa para el feminismo.
En cuanto a los casos de feminicidios recientes, Lecuona asegura que desde el feminismo radical se toma a estos crímenes como la demostración final de odio hacia las mujeres, sin embargo, son sucesos que se van preparando a través de otras muestras de violencia de género continuas.
Las pequeñas manifestaciones de violencia pueden ir escalando, y de un chiste pasar a al acoso callejero verbal, que a su vez se puede transformas en acoso físico, que al tener la oportunidad se convierte en violación, y si se desafía, en la última instancia, el feminicidio; siempre son cuestión de poder, actuar para ejercerlo, mantenerlo o recordárselo a las mujeres.
Le violencia, señala la filósofa, viene desde la educación “entendida como un fenómeno social” pues, aunque en el núcleo familiar se enseñen valores y un modelo de vida basado en el respeto y la equidad, la cultura alimenta la educación diferenciada, desde la que la mujer debe ser sumisa y el hombre dominante y violento.
La difusión de imágenes explícitas de feminicidios es una forma de perpetuar la violencia, porque la normaliza y le da difusión, sin mencionar que esas imágenes suelen estar acompañadas o cerca de otras más que remiten a la sexualización de las mujeres, reafirmando la idea de la mujer como objeto en ambos casos.
El feminismo radical es entonces una respuesta a la cultura, pues, aparte de ser una teoría y un movimiento, es una forma de ver el mundo, que permite identificar la violencia y no reproducirla.
Laura, autora de Las mujeres son seres humanos, nació en Ciudad de México, estudió Filosofía en la UNAM y tiene un máster en Literatura Infantil y Juvenil en la Universidad Autónoma de Barcelona; ha dedicado toda su vida profesional al mundo de la edición.
Actualmente colabora como traductora, correctora de estilo y editora para distintas empresas e instituciones, entre ellas Ediciones B, Fondo de Cultura Económica, Instituto de Investigaciones Filosóficas (UNAM), Leetra, Norma Ediciones, Océano, Paidós, Penguin Random House y Santillana Loqueleo.
