■ No se trasladó a la totalidad de los presos de alta peligrosidad
■ Advierte que se continúa sin cumplir con las condiciones de máxima seguridad
■ Hace unos días 165 reos del fuero federal fueron llevados a un centro carcelario de Guanajuato
Luego del traslado de 165 reos del fuero federal del penal de Cieneguillas a uno guanajuatense, el gobernador Alejandro Tello Cristerna informó que al interior del Cerereso continúa el reacomodo, pues el lunes pasado se movió al grupo delincuencial de Los Talibanes, que estaban hacinados en un pasillo, a un espacio más amplio. No obstante, reiteró, el penal sigue siendo una “bomba de tiempo” porque no se trasladó a la totalidad de los presos de alta peligrosidad y se continúa sin cumplir con las condiciones de máxima seguridad.
Tello Cristerna refirió que con el traslado lo que se confirmó es el tipo de reos que tiene el Cerereso de Cieneguilas, un penal que está albergando a presos que están ahí por delitos contra la salud, “entiéndase venta, siembra o trasiego de drogas”, que obedecen a la magnitud del problema que significa el combate al narcotráfico, el cual lleva en la entidad una década y que durante su gobierno se han realizado ya dos traslados, los cuales, dijo, han sido una decisión del propio Gobierno Federal.
“Se me comentó que había penales que no estaban siendo utilizados y que sí estaban siendo mantenidos como tal. Entiendo que al final, el ex presidente Peña Nieto entregó penales bajo esa condición de asociaciones público privadas, y se llevó a cabo el ofrecimiento del Gobierno Federal que agradecemos porque sí nos despresuriza, un traslado hace algunos meses y el traslado de los 165 reos de hace unos días”.
“Cuando yo platiqué con el secretario Durazo no hablamos de traslados. Yo le solicité apoyo para dar gobernabilidad, el apoyo de la Guardia Nacional, el apoyo para inversión, y bueno, más allá de lo que sucedió, que no fue al penal que yo suponía, también hablé con él para agradecerle y solicitarle que continuemos con el compromiso de fortalecer Cienegullas, de generar mejores condiciones”.
Tello Cristerna reiteró que sí es una “bomba de tiempo” como lo declaró en días pasados. Porque aunque se han tratado de mejorar las condiciones durante su gobierno, el penal a su llegada ya estaba en mal estado, pero recalcó que sí es una bomba de tiempo desde el momento en el que se encuentra subdividido por el tipo de población que se tiene y que en cualquier momento pudiera volver a suceder lo mismo que el último día del año, en la riña que terminó con 16 internos muertos.
El gobernador afirmó que lo mismo sucede en otras cárceles del estado como es el Cerereso de Fresnillo, en el que su población es también de cárteles rivales, aunque dijo que la situación no es privativa de la entidad, pues esto sucede en varias cárceles de la república, por lo que consideró que estos centros han dejado de ser de readaptación social porque se sigue delinquiendo al interior como se hace en el exterior, por lo que señaló que es uno de los grande retos del gobierno federal atender tal situación.
El mandatario estatal aseveró que Zacatecas requiere de un nuevo penal, “no lo tememos contemplado presupuestalmente pero lo requiere porque está rebasado en condiciones de seguridad. “Estamos hablando de un proyecto, no hay terrenos, presupuesto. Es un tema que ni siquiera hemos tratado con el gobierno federal, pero que ya lo trataré el 14 de enero en la primera reunión de seguridad”.
