- Se trata de «una de las políticas de prevención y se llama prevención situacional»
El tener en cuenta la seguridad y la incidencia delictiva para definir en qué colonias se cambia antes el alumbrado público, dentro de un proceso de renovación como el que está en marcha en Guadalupe, no sólo es un “factor a considerar”, sino que “de hecho, es una de las políticas de prevención y se llama prevención situacional”, aseguró el procurador general de Justicia del Estado de Zacatecas, Francisco Murillo Ruiseco.
El funcionario, previamente, había recordado el feminicidio de la estudiante de preparatoria de la Universidad Autónoma de Zacatecas (UAZ), Cinthia Nayeli Vázquez, y había señalado que este asesinato ocurrió a consecuencia de la falta de servicios públicos, en concreto de alumbrado, que se padece en la zona donde residía la joven y que es el fraccionamiento Villas de Guadalupe.
Este barrio, por el momento, continúa en las mismas condiciones. Pese a los altos índices delictivos que se presentan en sus calles, el ayuntamiento de Guadalupe no priorizó esta zona y otras colonias aledañas con el objetivo de que estuvieran entre las primeras en beneficiarse con la renovación de luminarias.
El factor en el que se basaron para determinar el orden de este proceso fue el mayor o menor cumplimiento en el pago del impuesto de predial y no la seguridad, mientras que esta situación a partir de enero se definirá en base a las necesidades de la empresa privada y el orden que más le convenga a la compañía. La incidencia delictiva tampoco será un factor tomado en cuenta.
No obstante, el procurador señaló que los niveles de violencia en las colonias debería contemplarse como argumento para determinar este orden ya que, recalcó, se trata de una forma de aplicar la política de prevención y, en concreto, la situacional, que “tiene que ver con evitar que esos espacios públicos sean una oportunidad para delinquir y a eso hay que apostarle”.
