Autora: Ana Karen Ángeles Jiménez
Residencia: Delegación Coyoacán, Ciudad de México, México
Hoy es un día especial.
Hoy les pienso recitar
una calaverita literaria
que nunca olvidarán.
Estaba la Catrina
descansando en el panteón,
tomándose un tequila para ver
el partido América vs Cruz Azul.
El Estadio Azteca retumbaba de emoción,
porque la calaverita
al medio tiempo
fue apoyar al mejor.
De pronto,
el Mictlán se burló,
porque los conejitos
no podía ni meter un gol.
La Catrina, muy bella,
pasó a lado del director.
Paquito le dijo:
“ayúdame por favor”.
Lo siento, querido,
pero deberías de tener
estrategias mejor, para así, a la otra,
no andes de chillón.
La Flaca se apiadó,
así que a la Máquina Azul
les regaló un gol,
que ni el Chaco Jiménez
pudo meter
porque voló el balón .
Los cruzazulinos se pusieron a llorar,
ya que Oribe Peralta
metió un gol al último minuto
y no se pudieron salvar.
Al terminar el partido, la Huesuda gritó:
ni en un clásico le pueden ganar,
porque el Piojo representa al equipo triunfador,
que es el América campeón.
La Huesuda organizó un tremendo pachangón,
y antes de irse, le advirtió a la Máquina Azul:
“Si no se ponen a entrenar,
yo misma me los voy a llevar
a que caven su tumba
porque jugar no se les da”.
