- Ya no medirá indicadores de desempeño en amonestaciones o enumeraciones de faltas administrativas, dijo
- Se ha avanzado en el tema de transparencia, «que permite muchas cosas, pero no es el final del camino”, pues se ha confundido transparencia con integridad
- El director general de Transparencia Mexicana ofreció una conferencia como parte de la celebración del primer aniversario del IZAI y la ley de transparencia
La novedad del Sistema Nacional Anticorrupción es el cambio en los indicadores de desempeño, ahora no centrada en amonestaciones o enumeraciones de faltas administrativas, sino en el número de redes de corrupción que se desmantelen anualmente, dijo Eduardo Bohórquez, director general de Transparencia Mexicana.
Expuso que la sociedad ya cambió y entendió que las raíces de los problemas del país son la impunidad y la corrupción, ante las que, para su erradicación ya no puede creerse en la «voluntad política» sino en la construcción de sistemas que las impidan.
Bohórquez ofreció la conferencia Sistema Nacional de Transparencia y las Leyes en la materia, en el contexto de la celebración del primer aniversario del Instituto Zacatecano de Acceso a la Transparencia (IZAI) y la Ley de Transparencia y Acceso a la Información Pública.
«Ahora sabemos más pero no pasa nada», dijo para referir que en los últimos años se ha avanzado en el tema de transparencia, «que permite muchas cosas, pero no es el final del camino», pues se puede ser muy transparente y muy deshonesto.
Aquí refirió el caso del ex gobernador de Veracruz, Javier Duarte. Esa entidad bajo su mandato ocupó los primeros lugares en índices de transparencia presupuestal, «era transparente al grado del cinismo».
Dijo que en adelante, ya que se ha confundido transparencia con integridad, no siendo lo mismo, «van a escuchar de una agenda TAI (Transparencia, Anticorrupción e Impunidad cero) que tendrá como eje justo al Sistema Nacional Anticorrupción”.
