Las condiciones de cambio y desarrollo del campo están dadas, los resultados de los foros que inició hace ya varias semanas el secretario de Agricultura, Ganadería, Desarrollo rural, Pesca y Alimentación, tendrán que dar resultados, como se habrán de dar en territorio zacatecano con los programas que aplican conjuntamente la Delegación de la Sagarpa y la Secretaría del Campo, dos instituciones que trabajan una al lado de la otra siempre con el mismo fin: lograr la reconversión productiva y darle a la tierra su vocación natural.
Es fundamental tener los recursos disponibles y llevarlos a donde se ocupan de manera clara y transparente, para que ese nuevo rostro que quiere Enrique Peña Nieto del campo nacional y de Zacatecas, sea otro, diferente y encaminado hacia mejores niveles de producción, porque el producir frijol ha sido y es negocio, aunque ya no tanto para el que produce, pero también se debe de incursionar en la siembra de otros cultivos que provoquen el ánimo del campesino a dejar atrás lo que toda su vida han hecho. Sembrar granos y forrajes, como es el caso de la avena, cebada, trigo, calabaza es una alternativa que incita al campesino a salir de la cotidianeidad, a buscar el mejoramiento de sus niveles de vida, pero también el campesino necesita de apoyos, de orientación y capacitación que requiere ahora con las reformas. Claro que el campo puede cambiar, pero no le dejen todo al más jodido por favor, ni se lleven lo que por ley, normas, reglamentos y programas le corresponde.
Ahora, con la proximidad del Cuarto Informe de Gobierno, un alto porcentaje de comentarios rondan en torno al tema y el campo no escapa, ni el sector educativo en el cual, los esfuerzos se concentraron para consolidar el crecimiento de la universidad tecnológica del estado de Zacatecas, en la que coordina las acciones una mujer leal y de probada experiencia que ha logrado en poco tiempo darle un giro positivo a la institución. Romo Fonseca con su capacidad y conocimientos, asumió la responsabilidad de la rectoría de una institución que crece y ofrece a la comunidad estudiantil nuevas opciones para el desarrollo de sus habilidades. Lo mismo sucede en el colegio nacional de educación profesional, el Cobaez. Una dependencia que sucumbió ante la inexperiencia de anteriores titulares, pero ahora, el barco ha logrado retomar el rumbo bajo la batuta de un maestro también experimentado profesional y políticamente, originario de Téul de Gonzalez Ortega, Felipe Ramírez Chávez.
Campos los hay que no repuntan porque poco trabajo hacen quienes están al frente, pero lo interesante es que se trabaja. Ahora con la proximidad de los procesos electorales de los dos años que siguen, algunas dependencias quedarán al garete, porque oiga usted, hay que salir a pelear las candidaturas de diputado federal y luego las presidencias municipales. Los partidos políticos deben de entrar en el terreno de la concientización de sus militantes, para que aquellos que consiguieron el triunfo en tal o cual elección, cumplan con el compromiso y no dejen a la deriva a los municipios. Los ayuntamientos no están en bancarrota porque no les han dado dinero, sino porque “no lo han sabido utilizar en bien de la sociedad”. Los políticos, los presidentes municipales, tiran a hacer del poder lo que les venga en gana, casos los ha habido y los vemos en la actualidad. El endeudamiento es resultado de las irresponsabilidades de aquellos en los que alguna vez confió esa sociedad que se ve engañada y defraudada. Ojalá vengan tiempos mejores para quienes habitan los municipios zacatecanos.
Los adelantados en la carrera por los puestos de elección ya se vieron mal porque no deben de olvidar que está primero la lealtad y el cumplimiento de responsabilidades, habrá quienes se olviden de cómo y de qué manera llegaron al lugar en que se encuentran y habrá quienes, marcados con el sello de la institucionalidad cumplirán hasta el último minuto con la encomienda de la soberanía popular. Brincar antes de tiempo el escalón, podría propiciar la ruptura de un tobillo, una mano, todo depende del brinco y las distancias y mire usted, el tema de las diputaciones federales es recurrente y aunque usted me diga que es algo repetitivo lo que digo, es tema que obliga. En los cuatro distritos (federales) siguen sonando nombres, por ejemplo, en el uno la baraja no aumenta, sigue firme Laura Herrera y empieza a sonar el nombre de Pepe Haro y en el distrito dos de quienes más se escuchan los nombres ya se lo he dicho: Pancho Escobedo, Leobardo Casanova, Silverio López y Le Roy Barragán, los cuatro con experiencia política aunque unos con más carisma y aceptación que otros y así, si observamos nombres en el tercer distrito, suena fuerte el nombre de la titular del DIF, Lucía Alonso Reyes y en el cuarto distrito se habla de varios: Gustavo Uribe Góngora, Jorge Luis Rincón, Enrique Flores Mendoza. Pero lo importante no son los nombres sino la capacidad porque en la oposición, aunque traen entre sus gallos y gallinas a desconocidos, no se debe de olvidar que la política también trae y da sorpresas, o usted ¿qué opina?
Nos veremos en la próxima entrega, hasta aquí mi comentario. ■
