■ El tema de la corrupción le ha sido indiferente a Peña
Luis Medina Lizalde, dirigente del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) en el estado, dijo que el balance sobre el primer año de gobierno de Enrique Peña Nieto es como “un dato que lo dice todo”, el que sus resultados no lograron más que “un poquito más de la cuarta parte de lo que ofrecía”, como crecimiento económico.
Sumó a esta lectura que durante este lapso los homicidios asociados a la operación del crimen organizado se colocaron por encima de las cifras que arrojaron los peores años de Felipe Calderón, al rebasar, según publicó la Revista Z, los 17 mil muertos.
Una cuenta a la que habría que añadir lo que suceda en los últimos dos meses de este 2013.
“Esta información evidencia el recrudecimiento de la violencia en el país, manifiesto además entre otros aspectos, en la aparición de grupos de autodefensa y narcofosas con decenas de cuerpos, que han tenido como respuesta en su mandato, sólo la minimización propagandística de los hechos”, puntualizó.
Por otro lado, el tema de la corrupción, subrayó, le ha sido indiferente a Peña Nieto, pues ni siquiera simula combatirla.
El primer año de gobierno de Enrique Peña Nieto tiene como estrategia “la agudización del modelo económico”, la radicalización del neoliberalismo que está complicando gravemente el futuro de México.
Sobre lo que vendrá ante el planteamiento de este escenario, expresó que “en este momento los mexicanos no tenemos nada más importante en la vida pública que detener la reforma energética. Ese es el gran desafío, detener esta criminal entrega de la riqueza nacional a intereses extranjeros”.
