La joven paquistaní Malala Yousafzai hizo este viernes 12 de julio en la Organización de las Naciones Unidas (ONU) un ferviente llamado en favor de la “educación para todos los niños”, asegurando que las amenazas de los talibanes no la van a silenciar.
“Se pensaron que la bala me silenciaría, pero fracasaron”, dijo con voz firme Malala, nueve meses después de que los talibanes le dispararan en la cabeza por defender la escolarización de las niñas. Pero “del silencio han salido miles de voces”, afirmó la joven, que se cubrió la cabeza con un chal rosa.
“No estoy aquí para hablar de venganzas personales contra los talibanes (…) estoy aquí para defender el derecho a la educación de todos los niños”, reconoció la joven, que este viernes celebró su cumpleaños número 16.
“Los terroristas pensaron que cambiarían mis objetivos y detendrían mis ambiciones, pero nada ha cambiado en mi vida, excepto esto: la debilidad, el miedo y la desesperanza han muerto; la fortaleza, el coraje y el fervor han nacido”, proclamó Malala, ovacionada varias veces durante su discurso.
“Tomemos todos nuestros libros y nuestros bolígrafos. Son nuestra arma más fuerte. Un niño, un profesor, un bolígrafo y un libro pueden cambiar el mundo. La educación es la única solución”, reiteró, al tiempo que defendió que los hijos e hijas de talibanes sean escolarizados.
La joven paquistaní aseguró que “hoy no es el día de Malala, sino el día de todas las mujeres, todos los niños, todas las niñas que han alzado su voz para defender sus derechos”.
El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, que se refirió a la joven como “nuestra heroína”, felicitó a Malala por lanzar “un mensaje de esperanza y dignidad”. “De lo que tienen miedo los talibanes es de que los jóvenes sean educados”, afirmó.
Ban Ki-moon recordó que 57 millones de niños en edad de acudir a la escuela primaria no reciben escolarización. “La mayoría son niñas y la mitad vive en países en conflicto”.
También defendió que “las escuelas deben ser refugios para todos los niños y niñas”, en referencia a los recientes ataques contra centros educativos en Pakistán y Nigeria.
Malala entregó a Ban una petición con más de 330 mil firmas para que los 193 países miembro de la organización financien profesores, escuelas y libros.
El ex primer ministro Gordon Brown, enviado especial de la ONU para la educación, presentó a Malala en la sede de la ONU como la “niña más valiente del mundo” y señaló que su recuperación es un milagro.
Los talibanes dispararon a la cabeza de la joven paquistaní, gran defensora de la escolarización de las niñas, el 12 de octubre del año pasado cuando regresaba a su casa en un autobús escolar en el valle de Swat.
Tras el ataque, su familia se trasladó a vivir a Birmingham (centro de Inglaterra), donde la joven fue sometida a múltiples operaciones. Los médicos tuvieron que colocarle una placa de titanio para cubrir el agujero en su cráneo, pero uno de sus oídos ha quedado gravemente afectado.
La revista Time la nombró en abril como una de las personas más influyentes de 2013 y es considerada una de las candidatas más fuertes para ganar el próximo Premio Nobel de la Paz. Además, ya ha firmado un contrato de 3 millones de dólares para escribir su biografía.
Los talibanes dejaron claro que atacaron a Malala para decir al mundo que las niñas no tienen derecho a recibir una educación. Han señalado que la joven sigue siendo su objetivo.
Malala empezó a escribir con 11 años un diario, bajo el pseudónimo de Gul Makai -una heroína pashtún-, que la BBC publicaba en su sitio en urdu.
Palabras de Malala,
sólo el comienzo: Brown
Este sábado el ex primer ministro británico Gordon Brown afirmó que el inspirador discurso de la joven paquistaní Malala Yousafzai en las Naciones Unidas sobre el derecho de los niños a ir a la escuela, es sólo el comienzo de un mayor impulso a la educación.
Aseveró que Malala regresará a la ONU en septiembre para presionar sobre su punto, de acuerdo con un comunicado de la campaña A World at School, de Brown.
Acompañada de Brown, Malala hablará durante una cumbre educativa de líderes mundiales durante la semana de la Asamblea General.
Ahí, la joven de 16 años demandará acción en beneficio de 57 millones de niños alrededor del mundo que no tienen acceso a la escuela.
En tanto, Brown, quien es el enviado especial de la ONU para la educación, viajará a Pakistán en julio para discutir asuntos educativos con el nuevo gobierno del país. También pretende visitar Nigeria, la nación más poblada de Africa.
Entre ambos, Pakistán y Nigeria tienen 16 millones de niños que no van a la escuela, la mayoría niñas.
Brown y Yousafzai se reunieron con el alto comisionado de la ONU para Pakistán este viernes con el fin de discutir la situación de más de 5 millones de niños que no van a la escuela en el país.
“El discurso de Malala es sólo el comienzo de un impulso trascendental a favor del cambio rumbo al 2015, para lidiar con la emergencia educativa”, afirmó Brown.
El Objetivo de Desarrollo del Milenio en educación impuesto por la ONU en el 2000 pretende que para 2015 todos los niños tengan acceso a una escuela.