17.8 C
Zacatecas
viernes, 13 junio, 2025
spot_img

Angelus Novus

Más Leídas

- Publicidad -

Por: ÁLVARO LUIS LÓPEZ LIMÓN* •

La Gualdra 672 / Arte

- Publicidad -

En 1920, Paul Klee pinta Angelus Novus, una figura angelical enigmática y deforme. Esta acuarela de Klee muestra la imagen de un ángel que mira frontalmente; su mirada se fija en un punto del cual parece pretender huir. Los brazos se levantan como si gesticulase nerviosamente por algo que le preocupa. La cabeza no mantiene proporción alguna con el resto del cuerpo. Completamente lateralizados aparecen dos ojos con iris de color marrón intenso, que destacan dentro de la uniformidad cromática que mantiene la acuarela. El cabello está revuelto por la acción del viento. Sus grandes flecos adoptan la forma de espiral. Parece estar flotando en medio de la nada. Sus pies (con garras como de pájaro) pareciera que acaban de alzar el vuelo. Sus brazos están levantados dibujando una uve. Los dedos de las manos se extienden, largos. Existe una evidente desproporción entre las extremidades superiores y el resto del cuerpo, así como con la cabeza. Del interior de la boca abierta se descubren unos dientes largos y blancos. Los ojos marrones, grandes y muy abiertos nos miran fijamente. La cabeza se cubre de pelo ondulado y enmarañado. Los colores –de fondo e imagen–mantienen la escala de tonos amarillentos y ocres. La imagen se distingue del fondo mediante un trazo fino en color negro que la delimita. 

La novena tesis de la filosofía de la historia de Walter Benjamin, inicia con un poema de G. Scholem, compuesto por cuatro versos que se titula, Saludos al Angelus, y dice: “Mi ala está pronta al vuelo, / vuelvo voluntariamente hacia atrás, / pues si me quedase tiempo para vivir, / tendría poca fortuna. [prosigue Benjamin] Hay un cuadro de Klee que se titula Angelus Novus. Se ve en él un ángel, al parecer, en el momento de alejarse de algo sobre lo cual clava la mirada. Tiene los ojos desencajados, la boca abierta y las alas tendidas. El ángel de la historia debe tener ese aspecto. Su cara está vuelta hacia el pasado. En lo que para nosotros aparece como una cadena de acontecimientos, él ve una catástrofe única, que acumula sin cesar ruina sobre ruina y se las arroja a sus pies. El ángel quisiera detenerse, despertar a los muertos y recomponer lo despedazado. Pero una tormenta desciende del Paraíso y se arremolina en sus alas y es tan fuerte que el ángel no puede plegarlas. Esta tempestad lo arrastra irresistiblemente hacia el futuro, al cual vuelve las espaldas, mientras el cúmulo de ruinas sube ante él hacia el cielo. Tal tempestad es lo que llamamos progreso”. 

Benjamin advierte sobre alienación del presente, la modernidad ya es un territorio minado de peligros para los seres vivos, urge la interrupción del presente y del pasado, la fragmentación del tiempo, romper el discurso de los vencedores, abandonemos las ruinas del capitalismo. La opresión se detiene eliminando la idea de la historia lineal. Walter Benjamin, propone la construcción de imágenes históricas para visualizar ideas filosóficas que hagan confluir, arte, filosofía e historia. 

Walter Benjamin, Tesis sobre filosofía de la historia y otros fragmentos.
Editorial ITACA, UACM, 2018, pp. 44 – 45.
*UAEH.

 

- Publicidad -

Noticias Recomendadas

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

Últimas Noticias

- Publicidad -
- Publicidad -