El colectivo Ciudadanía Participativa de Zacatecas llevó a cabo la reunión a la que se invitó formalmente al mandatario estatal a asistir para exponer la viabilidad social, técnica, ambiental y financiera del proyecto del segundo piso en el boulevard López Mateos.
Al no asistir el gobernador a la convocatoria, enviar a representante alguno o responder a la invitación, o al escrito turnado hace seis meses, los asistentes a la reunión consideraron que ya se han agotado las vías institucionales, para conseguir una audiencia con las autoridades responsables de este proyecto, por lo que se requieren acciones más contundentes, coincidieron varios asistentes.
Lourdes Velázquez, representante de 300 comerciantes del Centro Histórico, manifestó su adherencia a esta oposición a la obra del viaducto elevado, externando que las afectaciones serían también para ellos y todos los zacatecanos; agregó que no es creíble que la obra se realice dejando libre una vía del boulevard.
El ex legislador Javier Calzada señaló que no existe una autorización expresa de la Legislatura para proporcionar el financiamiento multianual que se dice tendrá la obra. El costo de 3 mil 600 millones de pesos estimado para el viaducto subirá a 7 mil, 15 mil o 30 mil millones, y como sería «una obra de Gobierno del Estado está garantizado que será una construcción de mala calidad», subrayó.
También resulta importante señalar la incapacidad de la legislatura saliente que le ha firmado un cheque en blanco al gobernador, para la construcción de un segundo piso, que no tiene estudios de viabilidad, puntualizó el universitario García Zamora, quien propone que los ciudadanos no paguen impuestos, mientras no se pueda entablar un diálogo con el gobierno.
«El gobernador no nos ve, ni nos oye» coincidieron varias personas que tomaron la voz, comparando la actitud del mandatario estatal con la que tenía Carlos Salinas respecto a personas que consideraba opositores, y manifestando tajantemente su rechazo a las reuniones privadas que propuso el secretario de Economía; «las reuniones deben ser públicas», sostuvieron.
Se calcula que serán al menos 172 comerciantes y vecinos del boulevard metropolitano, los directamente afectados por la construcción del segundo piso, por lo que en esta reunión se vertieron varias propuestas de acción directa y que resulten informativas para la población en general.
Scarlett Ramos y Gabriela Elazalde, dos jóvenes que se unieron a esta organización ciudadana recientemente, manifestaron que el beneficio centrado en «los cochistas», y la falta de un diagnóstico vial y de un análisis urbano arquitectónico para sustentar la construcción del segundo piso, son algunas de las razones para rechazar el segundo piso. Ramos es arquitecta y doctora en Urbanismo, y ofreció su asesoramiento para la revisión de cuestiones técnicas de forma gratuita.
«El boulevard López Mateos sí está en la zona de amortiguamiento encargada de delimitar la zona histórica», y la construcción de un segundo piso disminuirá la plusvalía de las construcciones en el boulevard, señalaron los comerciantes organizados en una carta que se ha dirigido al gobernador y que se leyó en la reunión.
“Se necesita movilidad social, no urbana”, “el segundo piso no sacará a Zacatecas del atraso en que se encuentra”; para sustentar esta “capa de concreto gigante se debería aportar una evaluación de costo-beneficio compartida con la sociedad”, y considerar los daños ambientales, con respeto a los acuerdos internacionales, indica la carta.
Aprovechar las vías existentes es un aspecto positivo del plan MOBI, señalaron los comerciantes, quienes también proponen «una vigilancia real y efectiva para respetar los carriles y espacios, agilizar subidas y bajadas del pasaje», para mejorar el tráfico por el tramo del boulevard en el que proyecta la construcción del viaducto elevado.