El pasado 30 de abril, el pleno de la Cámara de Diputados votamos por la integración de los Grupos de Amistad con los países con los que México sostiene relaciones diplomáticas. Dichos grupos tienen como objeto dar atención y seguimiento a los vínculos bilaterales con sus órganos de representación popular.
Por lo anterior, las y los legisladores miembros de cada Grupo de Amistad tiene un alto compromiso con las realidades de los pueblos con quienes el Poder Legislativo mexicano es un puente de entendimiento entre nuestras naciones.
Es en este sentido, que, como presidente del Grupo de Amistad con Palestina, ratifico el compromiso de este grupo de diputadas y diputados para promover la paz y la convivencia entre israelíes y palestinos.
La construcción de la paz es fundamental para la sobrevivencia de la humanidad, por ello, no podemos permitir que tal situación en medio oriente continúe. En primer lugar, porque supone un ataque descarnado a la vida de la población palestina y, en segundo lugar, porque pone en jaque al multilateralismo y al orden internacional establecido hace 75 años y, por tanto, tendrá consecuencias gravísimas sobre toda la humanidad.
Todas y todos tenemos una responsabilidad ineludible. Tenemos que impulsar las negociaciones en los más altos niveles para para hacer realidad el alto el fuego permanente; es vital crear las condiciones para asegurar que llegue el acceso humanitario suficiente y sostenido para lograr el cumplimiento del Derecho Internacional Humanitario y los Derechos Humanos. Hay que poner fin al comercio de armas, el cual es un problema global que mantiene vivos diferentes conflictos en el mundo, en el cual ganan unos pocos a costa de la sangre de inocentes.
El 25 de abril de 2024, México participó en el debate abierto del Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas (CSONU) sobre la situación en Oriente Medio, Héctor Vasconcelos y Cruz, en su carácter de representante permanente de México ante la ONU, aseguró que México respalda “una solución integral y definitiva del conflicto, bajo la premisa de dos Estados, que atienda las legítimas preocupaciones de seguridad de Israel y permita la consolidación de un Estado palestino, política y económicamente viable, que conviva con Israel dentro de fronteras seguras e internacionalmente reconocidas, de conformidad con el derecho internacional, en particular con las resoluciones de la ONU.
Consecuentemente, el pasado octubre, nuestra presidenta, Claudia Sheinbaum se manifestó por el derecho de Palestina a ser reconocido y a vivir una vida en paz, lo cual marca la línea de trabajo que como Grupo de Amistado con Palestina debemos seguir, ella dijo: “El Estado palestino debe ser reconocido en toda su magnitud, al igual que el Estado de Israel. Esa ha sido la posición de México desde hace muchos años”.
Es en este sentido que la titular del Poder Ejecutivo dio un paso valiente y necesario al reconocer, el pasado 20 de marzo a Palestina como un Estado legítimo. Este acto coloca a México del lado correcto de la historia y desafía las presiones internacionales.
México es un país amante de la paz, pues nuestra historia ha estado enmarcada por conflictos que han enlutado a millones de mexicanos a través de la historia. Nuestro camino hacia lo que hoy vivimos en un camino de orgullo y dolor. Sabemos de sobra que la violencia sólo engendra violencia y por ello, deseamos que el conflicto que desde 1948 se desarrolla entre Israel y Palestina termine. La humanidad tiene que entender que el camino de la sangre nos acerca cada vez más, a la destrucción de la vida como la conocemos.
Es el fin de lo que significa ser humano, es la pérdida del valor de la vida y con ello, es la pérdida de todo lo que es valioso. Niñas, niños, mujeres, personas de la tercera edad, hombres y mujeres jóvenes, todas y todos debemos defender la paz en cada rincón del mundo, pues nadie puede quitarnos el derecho de ser felices, de soñar, de amar, de disfrutar un mundo cada vez más susceptible a ser destruido por la ambición y el odio de unos cuantos.