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jueves, 28 marzo, 2024
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■ La superficie de siembra en este ciclo fue menor, pero el precio de la fruta salvó la cosecha

Uva fresnillense se consolida en el mercado nacional

■ Por su calidad y grados brix, fue comercializada en mercados de la Ciudad de México y Jalisco

■ En comparación con el año anterior, el precio por kilogramo alcanzó un incremento superior al 33%

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Por: SUSANA ZACARÍAS •

Aunque la producción de uva en Fresnillo fue menor a comparación al ciclo agrícola anterior, los productores de la vid aumentaron sus ingresos porque los frutos fueron comercializados a precios más elevados y permitió que el margen de ganancia fuera positivo para la mayoría de los campesinos de la región.

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Incluso algunos de ellos aun comercializan en el mercado local las últimas cosechas de uvas y el precio se mantiene debido a la demanda que tiene en el mercado, aunque la calidad y el sabor no sea la misma a comparación de los primeros cortes que se tuvieron a finales de julio y principios de agosto.

Manuel Homero Urquizo Félix, productor de uva en El Mineral, reveló que de manera general, el presente ciclo agrícola fue bueno para los viticultores, aunque los volúmenes de producción varían de acuerdo con la región donde se sembraron, pero como en otros ciclos, la más productiva se presentó en la comunidad El Salto.

Dentro de la producción del año 2021, la producción de uva fue mayor y el precio de la fruta se situó entre los 6 y 9 pesos por kilogramo, para este ciclo agrícola, el panorama fue más alentador al encontrar oportunidad en el mercado para que el producto fuera comercializado entre los 10 y 12 pesos.

“Llega un punto donde se saturan los mercados y baja el precio de la fruta, pero este año sí se mantuvo el precio razonable, que incluso provocó que varios compradores foráneos tuvieran que mandar sus camiones a las comunidades de cosecha para recoger la producción de este año y comprar de manera directa sin intermediarios”, explicó el productor.  

Otro de los aspectos que ayudó a la uva fresnillense a consolidarse en el mercado nacional fue la calidad obtenida en el fruto, el cuidado y esmero en la tierra fue factor para que una gran cantidad de producción cumpliera con los estándares requeridos, además de que los productores han invertido para mejorar la presentación, transporte y envío de la cosecha. 

Expuso que a pesar de los buenos precios dentro de esta cosecha, se presentaron varios casos de productores de vid que decidieron darle un plus a la producción y la ofertaron en otras plazas de la República Mexicana como la Cuidad de México y Jalisco, y este envío contribuye a que el precio de la uva se mantenga.

Antes de la pandemia, el municipio, en coordinación con los productores de vino, realizaba el festival del vino con el fin de dar a conocer esta presentación que algunos productores le han apostado para tener otro plus a sus ingresos y esperan que de nueva cuenta se logre retomar y con ello apoyar a los productores de vino artesanal de las comunidades El Salto, San Jerónimo y San José del Río, que han apostado a esta nueva presentación de productos. 

Durante esta cosecha, algunos productores de Río Florido, El Baluarte y El 6 de Enero manifestaron que obtuvieron rendimientos de 4 a 5 toneladas por hectárea a consecuencia de la frecuente sobreexplotacion de la tierra, pero existen nuevas superficies de siembra donde se logró obtener entre 8 y 10 toneladas de uva por hectárea. 

Para el proceso de cosecha, la producción depende de un 90 por ciento del método de riego, cabe señalar que la mayoría de la producción tanto de uva como de otros productos de la región, como son manzanas, duraznos, maíz, frijol y chile son regados por la afluente de la presa Leobardo Reynoso, que deriva del Río Aguanaval, motivo por el cual la sequía no representó una amenaza para los volúmenes de producción.

Desde hace más de siete años, el estado ocupa el tercer sitio en cuanto a producción de uva a nivel nacional, en Fresnillo, la comunidad El Salto es donde mayor volumen se produce junto con otras 18 regiones del municipio como son San José del Río, San José de Lourdes, Presa Leobardo Reynoso, entre otras, que suman una producción por año de 10 mil 800 toneladas con cinco variedades diferentes.

Según datos de la Unión Agrícola Local de Viticultores de Fresnillo, en el municipio existían aproximadamente 600 hectáreas de viñedos, en promedio cada una de ellas tiene una producción cercana a 8 toneladas por superficie, la mayoría de ellas con calidad cercana a los 19 grados brix, que es la que determina la calidad de la fruta y, por ende, su fácil comercialización en otros estados de la República.

Actualmente, se ha disminuido la producción de uva en Fresnillo, Urquizo Félix recordó que la región era una de las más importantes de producción y aunque el número de viticultores se ha mantenido, la superficie de siembra es la que se ha disminuido ante el incremento del precio de los insumos como fertilizantes y el diésel. 

Los altos costos en los insumos y el desarrollo de la pandemia del Covid 19 han sido obstáculos para que se pueda concretar el proyecto de la construcción de una planta viticultora que desde el año 2015 se había gestionado con los migrantes radicados en la Unión Americana, con el objetivo de dar valor agregado a la producción de vid, para lo cual necesitarían una inversión inicial por el orden de los 65 millones de pesos. 

Según el estudio de factibilidad, en lugar de importar a bajo precio la uva, esta se quedaría en el municipio para la elaboración de vino tinto de mesa de gran calidad, con la semilla sobrante se realizaría la tecnología para crear aceite comestible y el gabazo restante se utilizaría como pigmento para pinturas, para de esa manera aprovechar la totalidad del producto, pero el proyecto se encuentra estancado por falta de presupuesto tanto de los migrantes como de los productores de la región. 

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