Durante el presente periodo vacacional, los comerciantes de la comunidad de Plateros han observado un comportamiento positivo en la afluencia de turistas que han regresado a visitar el templo del Santo Niño de Atocha, la llegada de más personas representa un milagro para los platerenses, porque desde hace dos años las visitas eran escasas, lo que provocó el colapso financiero de la principal actividad económica del lugar.
Con esta recuperación, los comerciantes pretenden retomar la esencia de la comunidad de ser la tierra de la fe y de los milagros, y posicionarse de nueva cuenta como uno de los centros turísticos religiosos más importantes no sólo de la entidad, sino de todo el país, tal y como estaba catalogado hace aproximadamente 15 años.
Plateros era considerado como el tercer centro turístico religiosos más visitado de toda la república mexicana, sólo superado por la Basílica de Guadalupe en la Ciudad de México y el Templo de la Virgen de San Juan de los Lagos, en Jalisco.
Sin embargo, dos fenómenos consecutivos fueron los que alejaron a los fieles devotos del Santo Niño de Atocha. El primero fueron las restricciones sanitarias a consecuencia de la pandemia por Covid-19 y casi inmediatamente los hechos de inseguridad que también se registraron no sólo en la comunidad sino en todo el municipio.
Según el testimonio de algunos comerciantes, y comparando con años anteriores, a partir del mes de julio se ha observado un comportamiento positivo en cuanto a la afluencia de visitantes. Los platerenses refieren que principalmente son turistas provenientes de Estados Unidos que acuden, en su gran mayoría, a manera de agradecimiento.
Este periodo vacacional será clave para los comerciantes de la comunidad, pues es el primer verano sin restricciones después de la pandemia y en el que los hechos delictivos en la zona han mermado. A consecuencia, la presencia de visitantes es cada vez mayor y genera esperanza entre los platerenses, ya que el 90 por ciento de su actividad económica depende de la afluencia de los peregrinos.
Guillermo López Moreno, delegado de la comunidad de Plateros, informó que, desde el pasado mes de julio, la llegada de los autobuses en peregrinaciones es constante y genera buen ánimo entre los habitantes, a tal grado que desde muy temprano se disponen a abrir sus puestos en espera de recibir a los turistas.
Explicó que, a comparación de los años anteriores, el turismo religioso incrementó hasta en un 25 por ciento, lo que llena de esperanza al comercio después de años complicados con importantes afectaciones en este sector.
“Particularmente, esta semana ha sido sino muy buena. Ya se ha notado la presencia de los peregrinos, porque estamos saliendo de una situación muy complicada, son diferentes los aspectos que nos han pegado no sólo a Plateros sino a varios puntos y es por ello que tenemos que trabajar y tratar de ofrecerles una recepción cálida y que se sientan seguros y cobijados por el comercio de la comunidad de Plateros”, señaló el delegado de Plateros.
Recordó que hasta hace apenas un par de años, las peregrinaciones provenientes de diversos estados del país solicitaban el resguardo de las autoridades de seguridad y su estancia era muy corta, en algunos casos sólo acudían a la celebración religiosa y se iban por temor a los hechos delictivos.
Pero la situación ha cambiado y los visitantes que llegan a la comunidad lo hacen sin la presencia de las autoridades de seguridad y, según López Moreno, con ello se demuestra a los files que la situación de seguridad en Plateros, si no está al 100 por ciento, por lo menos los hechos extremos quedaron atrás.
Para seguridad de los visitantes, aún está activo el destacamento de la Policía Estatal Preventiva que lleva a cabo de manera frecuente rondines tanto en vehículo como a pie, lo que ha generado la percepción de tranquilidad no sólo para los foráneos sino para los mismos habitantes de Plateros.
Agregó que la actual recuperación del turismo en la comunidad no es cantar victoria, y el reto será mantener las cifras hasta el próximo periodo vacacional decembrino, fecha en la que se espera mayor presencia de visitantes, tanto del interior del país como del extranjero; históricamente, el 25 de diciembre es cuando llegan más fieles devotos que ningún otro día del año.
Sin embargo, en este periodo vacacional, los habitantes de la comunidad esperan la llegada de las peregrinaciones provenientes de los estados de México, Querétaro, Guanajuato y Ciudad de México, entre otros del sur del país que junto con los paisanos contribuyen con la economía de la región.
“Esperamos que día con día, la gente se haga más presente, esto lo vemos los fines de semana sobre todo en los hoteles donde reciben a los peregrinos y el que se queden es muy importante para los prestadores de servicio y con ello puedan mejorar su economía y es un muy parámetro para medir las mejoras en la economía”, asentó.
Dentro del proyecto de recuperar la presencia de visitantes a la comunidad de Plateros, el Ayuntamiento de Fresnillo anunció que ha inyectado cerca de 80 millones de pesos en la creación de diversos atractivos en la comunidad para recuperar el turismo religioso que ahora emigra hacia otras partes del país.
La obra actual que realiza el Ayuntamiento es la construcción del camino que conduce al cerro donde se encuentra la figura del Santo Niño, considerada la más grande del mundo con una altura superior a los 15 metros; de igual manera, también se ha edificado un área especial de estacionamiento para los autobuses que lleguen en peregrinaciones a la colosal representación.
En la inversión también se contempla la instalación de las letras de Plateros, la construcción de la plaza y velaría donde se encuentra la figura del Niño de Atocha, así como la colocación de miradores para prolongar la estancia de los visitantes y con ello mejorar los ingresos económicos de los platerenses, tal y como ocurría hace algunas décadas.
