Como se había anunciado, el Sindicato Único de Personal Docente y Administrativo del Colegio de Bachilleres del Estado de Zacatecas (Supdacobaez) inició un paro laboral debido al incumplimiento del gobierno del estado para el pago del incremento salarial del año 2024.
Gerardo García Murillo, secretario general de este sindicato, afirmó que los trabajadores del colegio fueron engañados, ya que el gobierno del estado se comprometió a realizar el pago en el transcurso del mes de mayo, pero no sucedió.
“El nuevo director, Francisco Javier González Ávila, no cumplió con el compromiso pactado el 24 de abril, donde se compromete a pagar el retroactivo del incremento salarial del 2 ’24 a todo el personal de la institución. Tenemos la minuta que se firma y dice que a más tardar en mayo sería pagado el retroactivo equivalente a 18 millones de pesos”, dijo.
Es decir, indicó que no hubo cumplimiento y por tal motivo se ha iniciado el paro de labores, el cual se llevará a cabo de manera escalonada, es decir, solo el lunes, miércoles y viernes, a fin de poder concluir con las actividades escolares del ciclo escolar.
García Murillo comentó que el monto que se adeuda a los trabajadores es de 36 millones de pesos, de los cuales la federación y el gobierno del estado aportan la mitad cada uno; en este caso precisó que el Supdacobaez solo exige que el estado haga los trámites para que la federación aporte su parte, es decir, 18 millones de pesos.
Ante esa situación, comentó que el director, en efecto, solicitó un plazo de 15 días para atender la problemática, propuesta que presentó al Consejo del sindicato, pero este no lo avaló debido a que no hubo confianza al tratarse de un discurso informal, por lo cual inició la manifestación.
Recordó que el director y las autoridades del gobierno del estado tuvieron 40 días para llevar a cabo las gestiones necesarias para que la federación hubiese pagado el monto que le corresponde, pero incumplieron.
Sin embargo, García Murillo reiteró que el sindicato tiene disposición al diálogo con el director, pero con la expectativa de que haya una solución que realmente sea posible su cumplimiento.