■ Es una ocasión para que los petroleros inciten a otro tipo de sindicatos: Judith Rivas
■ Tiene que ser a partir de la cultura obrera más que de la conciencia de clases para lograr su democratización, señala la académica de la UPN
Luego de la renuncia de Carlos Romero Deschamps como líder del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM) después de 26 años, el sindicalismo mexicano tiene una oportunidad para reconfigurarse y reactivarse para combatir el outsourcing que dejaron los gobierno neoliberales, pero tiene que ser a partir de la cultura obrera más que de la conciencia de clases para lograr su democratización, considera Judith Rivas Hernández, docente investigadora de la Universidad Pedagógica Nacional campus Zacatecas.
Para la académica las razones del retiro de Romero Deschamps de estar al frente del sindicato de petroleros aún son poco claras en términos oficiales, sin embargo, se pudiera pensar en una primera etapa de una nueva reconfiguración que tiene que vivir el sindicalismo de los petroleros en términos de que vuelvan a reactivar la lucha que les dio origen en 1935.
Es una oportunidad que deben enfrentar estos trabajadores para que realmente pueda existir una democracia sindical dentro de sus filas, dado que históricamente el sindicalismo decimonónico tenía esa idea abierta en la que realmente los sindicatos servían para mejorar las condiciones de trabajo y de vida de sus agremiados, apunta Rivas Hernández.
Y es que para la catedrática además esta oportunidad de reactivación pudiera servir para que los petroleros inciten a otro tipo de sindicatos que existen para que igualmente reactiven la vida sindical después del outsourcing que los gobiernos priístas impulsaron desde la década de los 80.
Sin embargo la académica reconoce que la reconfiguración es difícil, porque estructuralmente hablando hasta dónde puede ser posible por la condición de la conciencia de clase. Si bien se apuntan nuevos panoramas para este sindicalismo, habrá que ver hasta qué punto están descorporativizados, pues quien va a suplir interinamente a Deschamps es también un político de extracción priísta.
Y es que de acuerdo con Rivas Hernández, la corporativización de los sindicatos es la causa de que se hayan politizado y convertido a lo largo de su historia en mafias, por lo que ahora la cuestión puede ser que la conciencia de clases, si es que la hay, termine en una posible democratización dentro del sindicato, aunque esto parece imposible a veces porque la vida democrática en México es muy limitada.
