La fe puede ser sucintamente definida como
una creencia ilógica en que lo improbable sucederá
Henry Louis Mencken
Ricardo Monreal Ávila, político mexicano y oriundo de la comunidad de Plateros en el municipio de Fresnillo en Zacatecas, pequeño poblado donde se encuentra un lugar enigmático y repleto de fieles devotos, cede de uno de los santuarios más visitados en todo el país, hablo del famoso ( Santo Niño de Atocha); quien se ha convertido en un símbolo de Zacatecas y fue adoptado como el protector de nuestros mineros. Monreal a lo largo de su vida ha confirmado que es un fiel devoto a él y que en momentos difíciles ha recurrido a este santo pequeño pero muy milagroso. El Santo Niño es sin duda un referente no solo de las creencias locales si no también es un referente internacional al que le adjudican bastantes milagritos.
El ahora Jefe delegacional de la Cuauhtémoc en la Ciudad de México, se encuentra nuevamente en un momento difícil y crítico en su carrera política y digo nuevamente porque el fantasma del pasado ha tocado nuevamente su puerta ahora en su calidad de aspirante a Jefe de la Ciudad de México. Y lo digo nuevamente porque allá por el año de 1998 en Zacatecas, todo se creía y estaba listo para que Ricardo Monreal sucediera la gubernatura por el mismo partido del PRI a Arturo Romo Gutiérrez; pero algo sucedió de último momento que sacaba a Ricardo Monreal de la jugada, le anunciaban que no sería el candidato oficial del PRI por el gobierno de Zacatecas.
Sorpresa que ni los propios militantes creyeron que sucedía. La aceptación no solo de la mayoría de la militancia del PRI estaba con él, si no muchos zacatecanos que vieron en Ricardo un liderazgo genuino que podía llevar los intereses de los zacatecanos a mejor puerto. Ante la motivación e indignación de muchos, Ricardo Monreal no se dejó caer y el PRD le abrió sus puertas para que él fuera quien abanderara las causas de un partido que estaba totalmente perdido en un estado marcado por su historia como priista. Encomendado plenamente al Santo Niño de Atocha, Ricardo arrasó las elecciones y gano la gubernatura de Zacatecas, pese tener todo en su contra de todo un sistema político complejo, salió avante de aquella situación que para muchos fue un sexenio bueno.
Quizá nuevamente Ricardo tenga que hacer una visita al santuario de Plateros, pedir por su aspiración a ser el referente de la capital del país. Morena que es su partido ahora, y el cual es uno de los principales fundadores junto con el Peje; ahora le están dando la espalda a sus aspiraciones. Mediante una consulta interna y abalada por los consejeros de Morena, Ricardo no fue favorecido por la militancia capitalina, fue quien menos nos esperábamos sinceramente, (soy uno de ellos) y no por su capacidad o genero si no por el hecho de que Ricardo es la mano derecha del fundador. Favorecieron a Claudia Shienbaum quien funge actualmente como jefa delegacional de Tlalpan, dejando fuera a personajes de peso político importantes como Martí Batres y el mismo Ricardo.
Bajo este escenario, esperábamos que Ricardo aceptara su derrota pero no es así, Ricardo ante su inmovible deseo de ser Jefe de la Ciudad de México ahora arremete ante el proceso interno y pide una nueva encuesta donde por lógica salga ganador, ya que de no salir como candidato oficial piensa seriamente emigrar a otros partidos para poder participar en las elecciones y salir avante como en aquel año del 98.
Para finalizar:
Tan delicada como importante será la decisión de Ricardo para sus aspiraciones personales y sobre todo, para las aspiraciones del Peje en su proyecto de nación. Por un lado dejaría débil al Peje en una gran parte muy importante en la operación política para la campaña presidencial. Por otro lado, se estaría jugando posiblemente su relación con Morena y sobre todo su relación con el tabasqueño en un futuro. Pero al parece ser Ricardo se la va a jugar “peje a quien le peje”; y es que el zacatecano está seguro de su popularidad en la capital y sobre todo seguro que será el ganador en la Ciudad de México que ni las mismas instrucciones de su jefe de partido podrá seguir con disciplina porque se antepone a su meta de corto plazo.
Mientras tanto Ricardo sigue afirmando que será candidato por Morena, consejeros del partido manifiestan su respaldo ante la comisión electoral, de no ratificarlo como candidato buscara partidos opositores donde si le den cabida a su proyecto por la Ciudad; “Mi proyecto A es ser candidato por Morena, no voy hacer candidato de otra cosa más que la de Jefe de la Ciudad”. El Monrealismo está más vivo que nunca, ahora es cuando la formula milagrosa misma que le funciono en el 98, puede ser su amuleto de salvación, pero sobre todo, es su amuleto que lo ha protegido en momentos sumamente difíciles, casos que solo el Santo Niño de Atocha puede salvarlo. ■
