Entre los 54 fallecidos, se lista una adolescente de 16 años. Luis Rodríguez Bucio, comandante de la Guardia Nacional, expuso que el vehículo siniestrado trasladaba, en dos cajas, “alrededor de 160 migrantes centroamericanos, y el conductor finalmente se dio a la fuga”.
Las muertes ocurrieron tras una intensa balacera de casi ocho horas en la Penitenciaría del Litoral. Los enfrentamientos entre reclusos también provocaron heridas a doce internos.