Caracas. El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, dijo este jueves que la «derecha» debe detener la violencia en las protestas contra su gobierno, mientras el país conmemoraba los 25 años del llamado «Caracazo», la conmoción social de 1989 que estremeció al país con cientos de muertos.
Un día después que el gobierno instalara una conferencia por la paz con distintos sectores con el objetivo de contener las protestas, Maduro dijo que la conferencia, a la que no asistió la oposición, busca que se imponga la Constitución y la paz.
«Las amplias mayorías de Venezuela repudian la violencia de pequeños grupos que agreden la sociedad, la derecha debe detener la violencia ya», escribió en su cuenta de Twitter.
Maduro dijo que tras dos semanas de protestas y barricadas en áreas residenciales han muerto 50 personas en hechos directa o indirectamente relacionados con las manifestaciones.
El gobernante sostiene que las protestas buscan derrocarlo a través de un golpe de Estado propiciado por la desestabilización.
Dijo que la conferencia nacional de paz, que fue instalada el miércoles con la ausencia de la oposición, busca acabar con los desórdenes a través del diálogo con todos los sectores del país.
«Anoche instalamos la conferencia nacional de paz y vamos a transitar la ruta de diálogo y acción para defender la Constitución y la paz. Sigamos construyendo una patria de paz y felicidad, para un pueblo que hoy es protagonista de su historia. Venezuela derrotará a los violentos», señaló.
Asimismo, Maduro pidió una oración por la memoria de los muertos de los hechos de hace 25 años, en la represión de los saqueos y desórdenes en el «Caracazo», que según las cifras oficiales de entonces fueron unos 300, pero el gobierno de Maduro afirma que llegaron a 3 mil.
En Caracas se realizaron marchas del oficialismo para conmemorar la fecha, mientras que estudiantes universitarios que encabezan las manifestaciones contra el gobierno realizaron una concentración en el este de la ciudad.
El «Caracazo» fue considerado una reacción popular a los acuerdos que el entonces presidente Carlos Andrés Pérez firmó con el Fondo Monetario Internacional (FMI), e inició cuando se decretó un aumento en el precio de la gasolina y su consecuente incremento en el transporte público.
La organización no gubernamental defensora de los derechos humanos Cofavic, creada para apoyar los reclamos de las víctimas del «Caracazo», dijo en una declaración que cuestiona la impunidad por los hechos de hace 25 años.
Señaló que pese a los pronunciamientos públicos de instituciones hasta ahora no se han establecido responsabilidades individuales por los crímenes.
Mientras, el líder opositor Henrique Capriles dijo que el gobierno de Maduro no ha dado muestras de una verdadera voluntad de diálogo y que por eso no asistió a la instalación de la conferencia de paz que convocó el gobernante la noche del miércoles.
«Hay que dar un paso que demuestre verdadera voluntad para responder a los reclamos. El gobierno no da ninguna señal de querer dialogar efectivamente», dijo en una rueda de prensa.