Fernando Galván Martínez, líder de los productores de frijol en Zacatecas, denunció que prácticamente todos los centros de acopio del estado han cerrado o están inoperantes debido a la falta de costales marca Segalmex, saturación de bodegas y pagos pendientes. Además, señaló que en algunos centros de acopio los costales han sido vendidos a intermediarios, conocidos como coyotes, quienes compran el frijol a los productores a 18 pesos por kilo y lo ingresan a los centros para venderlo al precio de garantía de 27 pesos.
“El problema es que la presidenta de la República no sabe y los funcionarios están haciendo de las suyas”, explicó.
Aunque oficialmente algunos centros permanecen abiertos, Galván Martínez indicó que la falta de costales de Segalmex hace imposible que los productores ingresen su frijol. «Es un total desorden, este programa nació muerto porque no planearon los centros de acopio (…)», afirmó.
Las bodegas saturadas y el anuncio de cierre han dejado sin espacio a miles de toneladas de frijol, afectando directamente a los productores en lugares como Sombrerete, Río Grande, Juan Aldama y Tacoaleche, donde solo se habrían ingresado mil 500 toneladas previo a su cierre este lunes.
El líder detalló que, de las 50 mil toneladas de frijol acopiadas hasta ahora en el estado, 25 mil siguen sin ser pagadas, lo que equivale a un adeudo de 675 millones de pesos. Este retraso se debe a que Segalmex ya cumplió su meta para Diconsa y Liconsa de 35 mil toneladas para las tiendas rurales, sugirió Galván Martínez.
Informó que, en Loreto, ya hay una lista de productores llevan dos meses sin recibir sus pagos. En Rancho Grande, Río Medina (Saín Alto), La Boquilla y Villa de Cos, las bodegas también están llenas. No hay cupo ni personal suficiente, y la falta de planeación ha afectado a todos los productores, enfatizó.
Además, señaló que solo se ha logrado acopiar el 25 por ciento del tonelaje que se produce en Zacatecas, estimado en 190 mil toneladas. Esto deja a una gran mayoría de productores sin la posibilidad de comercializar su cosecha.
El ingeniero advirtió que el programa de Segalmex enfrenta un posible desmantelamiento, señalando que las oficinas están siendo cerradas y el personal será trasladado a la Ciudad de México. Detalló que los funcionarios de Segalmex, como Luis Felipe Bárcenas y Ángel Olais, no están respondiendo a los productores ni atendiendo las llamadas.
Mencionó que ya existe un decreto para fusionar Segalmex con Sader, dejando únicamente Liconsa como programa operativo. Las reglas de operación no están claras, y el temor es que este programa desaparezca, lo que sería un golpe devastador para los productores, expresó.
Galván Martínez criticó al gobierno estatal por su falta de apoyo al campo. «No están organizando a los campesinos, no les interesa ayudarnos, y están completamente callados. Estamos desgobernados en el tema del campo», afirmó.
Sobre las posibles acciones, mencionó que los productores están evaluando movilizaciones, ya sea en instancias en el estado o directamente en la Ciudad de México.