Ammán. El papa Francisco hizo hoy un llamado a la paz en Tierra Santa tras su llegada a Ammán, donde comenzó un viaje de tres días que lo llevará también a los territorios palestinos y a Israel.
En un discurso en el palacio real de la capital jordana, tras ser recibido por el rey Abdulá II, Francisco aseguró que sigue “con mucho dolor” las continuas y fuertes tensiones en Medio Oriente.
Al mismo tiempo, el papa agradeció a Jordania sus esfuerzos por alcanzar la paz en al región. “Este gran objetivo requiere urgentemente una solución pacífica de la crisis siria, así como una solución justa del conflicto israelo-palestino», señaló Francisco en la primera parada de su viaje de tres días.
Además, el papa manifestó su “profundo respeto” por la comunidad musulmana, al tiempo que alabó la libertad religiosa y el papel de la minoría cristiana en Jordania.
“La libertad religiosa es de hecho un derecho humano fundamental. No puedo dejar de expresar mi esperanza en que será respetada en Medio Oriente y el mundo entero», dijo en el discurso ante decenas de líderes cristianos y musulmanes, en el que pidió que la minoría cristiana pueda “profesar su fe pacíficamente” y sea tratada en condiciones de igualdad.
Los cristianos se consideran a sí mismos, y lo son, ciudadanos plenos, y como tal buscan, junto con sus conciudadanos musulmanes, hacer su contribución particular a la sociedad en la que viven.
Francisco agradeció también al país sus esfuerzos en la ayuda a centenares de miles de refugiados iraquíes y sobre todo de Siria. “Esta acogida merece el reconocimiento y apoyo de la comunidad internacional”, añadió.
La Iglesia católica se sumará, en el marco de sus posibilidades, a esa ayuda, sobre todo a través de la organización caritas en Jordania.
Tras el encuentro con el rey, el papa oficiará una misa en un estadio en Ammán y después visitará el lugar donde se cree que Jesucristo fue bautizado, en las orillas del río Jordán, y se reunirá con refugiados palestinos.
