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viernes, 16 mayo, 2025
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De huelga y democracia

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Por: RENÉ LARA RAMOS •

 

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La importancia de la huelga estallada por el Spauaz, tiene fundamento legal y descansa y opera con base en la consistencia de la organización y actividad del personal académico agremiado que hace posible su efectividad: mediante las distintas guardias y turnos, resguardan sus centros de trabajo las 24 horas del día. El personal académico universitario mediante distintas actividades difunde su movimiento de huelga y el estado que guarda. Ayer, el Sindicato del Personal Académico de la Universidad Autónoma de Zacatecas, convocó a sus integrantes a manifestarse por las calles y celebrar un mitin en la Plaza de Armas de la ciudad de Zacatecas, para informar las razones de un estallamiento de huelga, decidido mayoritariamente por los profesores, relevante para conseguir la solución de las demandas que la hicieron estallar. Sobre el estado de la huelga, destaca con relevancia el hecho de que a varios días de iniciada, el Rector no ha convocado para iniciar a encontrar de común acuerdo y dentro de las posibilidades de la UAZ, la solución a las causales que la hicieron estallar; se informó de la situación en que se encuentra y del curso de las negociaciones entre la Rectoría y el Spauaz, se señaló que el Rector no se presenta a las negociaciones. No lo hizo para evitar su estallamiento; ni lo hace ahora, para avanzar en resolver la problemática pertinente y poderla levantar.  La acción del Rector de difundir en la prensa su oferta económica es insuficiente, no sólo está en juego ese tema, sino el dar continuidad a todo aquel problema al que se vaya encontrando solución o acuerdo, con el ánimo sindical – académico de no tener que hacer otra huelga ante los incumplimientos que surjan o se presenten. Punto central para su levantamiento es acordar cómo dar continuidad a lo largo del año, a los resolutivos para levantarla y acordar desde hoy, cómo controlar la contingencia de huelga entre Rectoría y Spauaz, cuando se presente. Por supuesto, semejante contingencia supone disponer de una agenda ejecutiva previa, elaborada de común acuerdo. Y disponer algún instrumento de control idóneo, para dar seguimiento cuantitativo, cualitativo, veraz y oportuno, a las acciones universitarias correspondientes.

En esta huelga, la ausencia de negociaciones, Rectoría – Spauaz, fue factor para su estallamiento y lo es en su prolongación. Para el Spauaz, con base en su emplazamiento y sin negociaciones, por no acudir a ellas el Rector, llegó el momento de convocar al personal académico, para emitir su voto acerca de estallar a no, la huelga. De hecho, la mayoría del personal académico votó realizarla como recurso para obtener solución a sus demandas, no todas de orden económico, pero sí materia de trabajo, y desde hace días la sostienen. De esto y más, se informará en la asamblea universitaria a celebrar mañana en el gimnasio del Campus UAZ-SXXI, cuyas decisiones pudieran ayudar a generar eventualmente las condiciones requeridas para su levantamiento. En general, el aspecto económico muestra cierta posibilidad en sus márgenes para consensar una solución, no desligada de lo que significa satisfacer las distintas opciones posibles de incrementos formales de personal académico, ya en funciones, sobre todo debido al crecimiento ordinario de dicha actividad, por la vía cualitativa o cuantitativa escolar. La  terminación de la huelga del Spauaz está en suspenso.

La conciencia ciudadana acerca a los ciudadanos a un terreno en el que cuestionan con radicalidad el hecho de votar, ante la relativa contribución a la mejora democrática obtenida mediante el voto. Ven muy leve la abolladura que los votos hacen al autoritarismo y a su secuela fáctica de ejercicio del poder a largo plazo, aun bajo formas democráticas. ¿Qué hacer? Lo mismo, incrementar, profundizar y difundir los avances en ese tema, y, a la vez, votar, y profundizar aún más, hasta encontrar que las formas democráticas que sujetan al autoritarismo, requieren generalizarse para someterlo, aun sin terminar con él en corto o mediano plazo. De votar o no votar: votar, insistir.

A propósito, Andrés Manuel López Obrador, realizó en el deportivo Plan Sexenal de la Ciudad de México la tómbola del Movimiento de Regeneración Nacional donde se rifaron las dos terceras partes de las candidaturas plurinominales, entre tres mil militantes de los 300 distritos electorales. Según él: “Fue un acierto este procedimiento, inédito nunca visto en la historia de nuestro país. Se hicieron asambleas en cada uno de los 300 distritos y en cada una, se eligieron a 10 candidatos: cinco mujeres y cinco hombres”, dijo el dirigente de Morena.

Votar o no votar, implica valores, argumentos, historias y trayectorias políticas de democracia o autoritarismo. La cuestión no es, votar o no votar, sino que hacerlo o no, genera autoritarismo o democracia, o acentúa lo uno o lo otro. ¿Lo relevante está en el proceso político y en la elección, o no? ■

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