Las luchas sociales, por necesidad son luchas por las utopías, es decir, vivimos para construir un proyecto ideal y beneficioso para la comunidad, que es muy improbable que suceda o que en el momento de su formulación es irrealizable.
Sin embargo, el camino para hacer realidad la utopía se basa en objetivos tangibles y acciones cuantificables y posibles que al conquistarse se traducen en pasos que nos acercan al mundo que imaginamos. Cada acto organizativo, cada lucha, cada acción de resistencia y cada discusión y debate significa una conquista para llegar al mundo ideal.
Así, cada proyecto social y político es una lucha por transformar el país en un mejor lugar, con los cuales, en la acumulación de luchas en el tiempo, se han materializado en el México que hoy conocemos, donde las libertades y justicia que hoy vivimos eran impensables hace unos cuantos años. Sin embargo, la utopía sigue lejos en un mundo que nos reta a mejorarlo todos los días.
Esto lo digo, pues desde hace meses volvimos a caminar cada rincón de Zacatecas para construir una opción para impulsar la construcción de un mejor Zacatecas desde el gobierno. Así nos acercamos a miles de personas que están deseosos de ser escuchados y de formar parte del progreso del Estado.
Recorrimos las ciudades y las comunidades para ver de frente las graves problemáticas de nuestra amada tierra y ahí, en medio de la pandemia, aprendimos que nuestra gente nunca deja de ver a la vida con orgullo, con la fuerza y el coraje que lo mantiene de píe a pesar de la pobreza, la violencia, los malos gobiernos y la ambición desmedida de unos cuantas familias que se han adueñado de Zacatecas.
Participamos en un proceso electoral interno de Morena, que afrontamos con dignidad para encontrarnos con una realidad que niega nuestros sueños y los caminos andados. La imposición y el poder de los que se han adueñado de la burocracia partidaria trazó el camino para que ayer se diera el fallo del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) forzara a un cambio de camino en la lucha para llegar a nuestro sueño de lugar más justo y libre.
El camino a la utopía no se detiene, seguirá por un camino que conocemos, en el trabajo de la organización social, donde mis hermanos y hermanas de lucha me alientan seguir impulsando un proyecto donde la educación y el trabajo diario son la base para hacer realidad un mundo que soñaron también los que nos precedieron. Aunado a este esfuerzo, nos acompaña el trabajo legislativo desde la Cámara de Senadores desde donde, con honor, sirvo a mi país.
Hoy tendremos que poner en pausa el proyecto del Gobierno, pues sabemos que estamos listos para contribuir a la grandeza de Zacatecas, sin embargo, hoy nuestros esfuerzos serán por hacer que nuestros compañeros contribuyan a la lucha social desde diferentes escenarios, al tiempo que fortaleceremos juntos, el proyecto de la 4T y de nuestro presidente Andrés Manuel López Obrador.
Somos hombres de partido y nuestra lucha siempre es hacia adelante, hacia arriba y hacia nuestras utopías. Cada acción que llevamos a cabo constituye victorias que nos acercan a la victoria que los gigantes que nos llevan en sus hombros soñaron. Somos productos de un pasado que nos impulsa a dejar un mejor Zacatecas para los que vienen detrás y a lado nuestro.
Nuestro alegato fue desestimado por el TEPJF de forma ilegítima pero no romperemos a Morena en el Estado pues existe el proyecto de la Cuarta Transformación que nos rebasa. Acataremos la resolución del Tribunal Electoral, aunque no compartimos su decisión, en pos de una lucha superior. Transformar a México y a Zacatecas.
No fuimos vencidos, aquí estamos, dignos, de pie, junto a nuestra gente y nuestro presidente, listos para la siguiente batalla pues nuestras utopías están intactas. Para vencernos hay que hacer que nos rindamos y eso nunca, nunca pasará. Cambiaremos a Zacatecas en un mejor lugar. De eso no tengan duda, será hoy, mañana o el día siguiente, nuestra lucha es una lucha de larga duración. Hoy fue sólo una batalla, la lucha sigue y sigue. ■
