■ Dicha práctica produce inflamación de la vía aérea y puede causar enfisema
■ El cigarro electrónico es un elemento que no está legislado y que viene a ser un hueco en la Ley General para el Control del Tabaco: Iván Torres Cuevas
2019 ha sido el año en el que se ha registrado la primera muerte a nivel mundial por el vapeo o uso del cigarro electrónico. Sucedió en Estados Unidos pero la alerta se ha encendido porque son ya más de 100 los internados por “una misteriosa enfermedad pulmonar”, según ha reportado el Centro de Control de Enfermedades del vecino país del norte, lo que tumba la tesis de que no hacía daño y que incluso era la opción viable para dejar de fumar.
Afortunadamente en Zacatecas, a decir de Iván Torres Cuevas, jefe del Departamento de Entornos Saludables y Adicciones de la Secretaría de Salud, no se han tenido reportes de hospitalizados por esta causa, aunque sí se tienen reportes del vapeo, sin embargo, destacó que es un elemento que no está legislado y que viene a ser un hueco en la Ley General para el Control del Tabaco, en la que se menciona solamente al tabaco y subproductos, por lo que al no estar catalogado como tal y no contener nicotina, sino vapor de agua con soluciones oleosas y aceites, ha quedado fuera de la legislación.
Sin embargo, advirtió el funcionario, el uso de él produce inflamación de la vía aérea y puede causar enfisema, y aunque se menciona que no tiene nicotina, hay algunos que lo mezclan con el objetivo de dejar de fumar, pero contiene soluciones oleosas y aceites que van a inflamar la vía aérea y que puede causar neumonitis o una inflamación que disminuye el flujo de oxígeno por el intercambio gaseoso a nivel pulmonar, y que puede llegar a provocar enfisema y en casos extremos, el cáncer.
Y es que entre las sustancias que conforman el vapeo y que se han comprobado científicamente se encuentra la pulegona, una sustancia que a decir del especialista se prohibió en alimentos por estar asociada al cáncer de páncreas y a la metástasis o diseminación del cáncer hepático. De igual forma contiene acetato de vitamina E que también inflama y que no está autorizado para su introducción vía área en el organismo; así como otras proteasas que se han asociado con el enfisema y cáncer pulmonar, de ahí pues que cause daño, no al nivel del cigarro común, pero sí considerable.
Otro de los riesgos, según Torres Cuevas, es que es un aparato que contiene humedad, entonces para poder garantizar la limpieza se tiene que esterilizar de forma constante, porque al quedarse húmedo después de haberlo utilizado pueden crecer bacterias incluso tan dañinas como las que producen cuadros severos infección y neumonía. Y el riesgo crece cuando las personas se lo prestan para compartir.
De acuerdo con el funcionario, cuando este aparato surgió hace aproximadamente cinco años fue como alternativa para dejar de fumar, sin embargo el efecto fue contrario ya que la gente que nunca fumó, al ver que se ha puesto de moda han comenzado a utilizarlo y algunos se han pasado al cigarro y después a la mariguana, sobre todo jóvenes entre los 14 a los 19 años de edad, por lo que su puesta en el mercado generó un efecto contrario.
Ante tal panorama, lo que se debe esperar para la regulación, consideró Torres Cuevas, es “la bajada en cascada” que ya empezó a nivel federal con la Comisión Nacional Contra las Adicciones que está tratando de modificar la ley para que se incluya el vapeo como un subproducto o producto asociado al tabaco, esto para garantizar la salud de las personas: que se prohíba en menores de edad y que se garanticen espacios libres de humo y vapeo, para luego “arrastrar” el tema a la Legislatura local y se modifique la ley acorde a la protección de la salud de la mayoría de la población respetando siempre el derecho de los demás.
