El origen de esta ceremonia, data de hace 195 años.
Fue establecida en la primera Constitución de 1824. El Congreso iniciaba sesiones el 1ro de enero y concluía el 15 de abril y, en la fecha de apertura, el Presidente acudía al recinto legislativo, para rendir un informe del estado que guardaba la administración pública a su cargo. Se trataba de un resumen de las actividades, obras, relaciones establecidas, y resultados del país en las diferentes áreas: educación, economía, política y salud.
Guadalupe Victoria fue el primer Presidente de la República en rendir un informe. Sin existir la obligación legal, se presentó ante el Congreso el 1 de septiembre de 1825. La situación del país era convulsa, debido a que apenas 4 años antes, se habían firmado Los Tratados de Córdova, con lo que se dio por terminada la guerra de Independencia, que duró 11 años.
No obstante, el Presidente en su informe dio a conocer que, a pesar de las penurias económicas por las que atravesaba el país, y del fallido imperio de Agustín de Iturbide, se había logrado vestir, armar y aumentar el Ejército; pagar los sueldos atrasados de los empleados y, atender en la medida de lo posible, la administración de justicia.
Benito Juárez, ya vigente la Constitución de 1857, en su informe del 31 de mayo de 1862, afirmaba que el pueblo apoya el orden legal, derivado de esa Carta Magna y rechazaba con indignación los “proyectos insensatos”, que proponían intervenir en los asuntos internos, así como intentar cambiar “bajo la sombra de bayonetas extranjeras”, la forma de gobierno que libremente se había dado a la República. El 8 de diciembre de 1867, en su informe anunció la victoria sobre los imperialistas, y la determinación de fusilar a Maximiliano, en tanto era un acto de justicia, que afianzaba la paz y pondría fin a las convulsiones internas.
Cuando Porfirio Díaz llegó al poder, se inició una nueva etapa en México bajo el principio de orden y progreso. Como titular del Ejecutivo, el 1 de abril de 1877, se presentó ante el Congreso y anunció, que comenzaba la época de la reconstrucción constitucional. Esto significa que bajo el amparo de la ley suprema se afirmaría la paz, y se protegerían bajo su “benéfico flujo” todos los intereses legítimos, con el propósito de desarrollar los grandes elementos de la riqueza del país.
Dos informes presidenciales de Díaz, cobraron importancia:
1910.- Sin hacer mención de Francisco I. Madero, se dirigió al Congreso para informar que las elecciones de los Poderes Federales, se había llevado a cabo con regularidad en todo el país, y destacó el excepcional interés con que los ciudadanos concurrieron a depositar su voto.
1911.- Díaz, no pudo ignorar a Madero, tampoco la convulsión que se vivía en diversos puntos del país. Lamentaba que los candidatos perdedores, no se hubieran limitado al legítimo ejercicio del sufragio popular, recurriendo a la violencia.
La decena revolucionaria, tuvo tres presidentes: Madero, Victoriano Huerta y Venustiano Carranza, no lograron mucho que informar, sólo aquello relacionado con el estado de guerra que se vivía en México.
Sin embargo, debido a la transformación que se dio en nuestro país, la Constitución promulgada el 5 de febrero de 1917, vigente a la fecha, retomó en su artículo 69 la obligación del Ejecutivo de acudir, a la apertura de Sesiones Ordinarias del Congreso, para informar por escrito sobre el estado general que guardaba la administración pública de la Nación.
A partir de la década de los cincuenta del siglo XX, todo giraba alrededor de la figura presidencial. El 1ro de septiembre se declaró día feriado. Se transmitía el informe en cadena nacional por radio y televisión. Todos seguían el Presidente en su recorrido, desde Los Pinos hasta el recinto del Congreso de la Unión. Lo escuchaban por horas, como si fuese la palabra de Dios. Se le aplaudía de manera exagerada. Luego, proseguía el besamanos en Palacio Nacional, donde la clase política le rendía todo culto y pleitesía.
El 1ro de septiembre, por eso era denominado como El Día del Presidente.
La fecha del informe presidencial, ha tenido algunas características. Estas son algunas: Adolfo de la Huerta, fue el primero que utilizó automóvil para trasladarse a la Cámara de Diputados. El informe del general Lázaro Cárdenas, fue el primero que en1935, se transmitió completamente por radio. El de Miguel Alemán, en 1952, fue el primer informe televisado. En su penúltimo informe, Gustavo Díaz Ordaz, se responsabilizó de los acontecimientos del 68. José López Portillo, en su último informe en 1982 se puso a llorar cuando nacionalizó la banca. Carlos Salinas enfrentó las primeras interpelaciones durante su informe. A Fox en 2006, los legisladores le impidieron la entrada al recinto legislativo. A partir de entonces, ningún Presidente volvió al Congreso.
Cabe señalar que el 15 de agosto de 2008 se publicó en el DOF, la reforma al artículo 69, eliminando el requisito de asistencia del Ejecutivo al Congreso para rendir su informe. Basta con que lo envíe por escrito.
Así se terminó con El Día del Presidente.
