■ El actuar de la dependencia sólo ha cambiado en seguir protocolos precisos, señala titular
■ Herramientas permiten que ahora se trabaje en conjunto con los centros de asistencia social
El procurador de Protección a Niñas, Niños, Adolescentes y Familia consideró que las nuevas facultades que hoy tiene la institución no hacen diferente el trabajo que realiza desde hace años, sino le han proporcionado herramientas legales. “El actuar antes era de buena fe” porque se creía que la dependencia “tenía que hacerse cargo” de los menores, pero las herramientas actuales le han permitido sustentar su intervención, entre otros casos, justo para restituir estos derechos con base en protocolos precisos.
Manuel David Pérez Navarrete citó como ejemplo el capítulo legal referido a los centros de asistencia social, “que hoy día nos permite la creación de un área en conjunto con la Procuraduría federal de Protección”, acerca de la supervisión, revisión y certificación de los mismos, pues ya existe la obligación legal por parte del Sistema DIF estatal para que estos centros tengan un funcionamiento adecuado.
Otras normativas que se involucran son las referidas a las familias de acogida y preadoptivas, sobre las que dijo, ya se tiene un marco legal “para sustentar que algún niño institucionalizado o liberado para adopción, se pueda colocar en alguna familia que no necesariamente lo pretenda adoptar”.
“Existe un capítulo en específico que se llama familias de acogida”, donde los menores son entregados en custodia para que tengan un sano desarrollo.
La Procuraduría de Protección a Niñas, Niños, Adolescentes y Familia interviene asimismo en la apertura de una carpeta de investigación del caso dentro del proceso de reintegración de los menores de edad que implica “mandarlos a la escuela, vestirlos, otorgarles herramientas psico-emocionales correctas a través de valoraciones psicológicas”. Todo eso se le denomina un Plan de restitución de derechos y existe un manual para ello, dijo.
Pérez Navarrete mencionó que ha trabajado dentro del Sistema Estatal para el Desarrollo Integral de la Familia por 11 años, siempre en la Procuraduría, ahora denominada de Protección a Niñas, Niños, Adolescentes y familia, que en este momento encabeza “y hacíamos exactamente el mismo trabajo que ahora, pero con una gran diferencia, hoy está fundamentado”.
Opinó que los sistemas DIF estatales presentan un avance significativo respecto de lo que establece la Ley General de los Derecho de las Niñas, Niños y Adolescentes (de la que deriva la modificación de las facultades otorgadas a las procuradurías de protección para estos sectores poblacionales).
Actualmente la dependencia registra asesorías en todos los rubros de su competencia, como divorcios, rectificaciones de actas de nacimiento, procedimientos para pensiones alimenticias, guardias y custodias, pérdidas de patria potestad y de adopción, mil 410 atenciones mensuales.
